El crecimiento de la población mundial, y también de la clase media, implica el acceso de más personas a una alimentación de mayor calidad. Se estima que de aquí a 2030 la demanda de alimentos podría aumentar un 60%, mientras que los recursos naturales son finitos. Según International Food Policy Research Institute, es posible aumentar los rendimientos de los cultivos 67% hasta 2050, reducir emisiones de CO2 un 50% y de fertilizantes y pesticidas un 20%. Y, en esta línea, hay compañías que buscan implementar soluciones para paliar estos problemas (equipos agrícolas con GPS, sensores remotos y análisis de datos, soluciones de granja vertical en interiores…).
Podemos invertir en esta megatendencia a través de acciones (Nutrien, Viscofan, Danone…), ETFs (como Rize Sustainable Future of Food UCITS ETF A USD -IE00BLRPQH31) o a través de fondos de inversión.
Pictet Nutrition
Invierte principalmente en renta variable de empresas internacionales que operan en sectores relacionados con la nutrición, especialmente los dedicados a mejorar la calidad, accesibilidad y sostenibilidad de la producción de alimentos.
El gestor combina el análisis del mercado y el análisis fundamental de empresas, para seleccionar valores que a su juicio ofrecen perspectivas de crecimiento favorables a un precio razonable. Tiene libertad para desviarse de la composición del índice de referencia.
BGF Nutrition Fund
Invierte a escala mundial al menos el 70 % de sus activos totales en valores de renta variable de empresas cuya actividad forme parte de sectores como la cadena de valor de la alimentación y la agricultura. Selecciona empresas que buscan activamente soluciones a los problemas de sostenibilidad globales dentro del ámbito de la nutrición a través de tendencias en materia de nutrición sostenible. El Fondo busca los «mejores valores de su clase» a la hora de realizar una inversión sostenible. Esto significa que el Fondo selecciona a los mejores emisores (desde una perspectiva ESG) para cada sector de actividad relevante (sin excluir ningún sector de actividad). Más del 90 % de los emisores de valores en los que invierte el Fondo tienen una clasificación ESG o sus criterios ESG se han analizado.