Pablo García ya ha intervenido en diversos medios de comunicación, y en LIBERTAD FM se preguntaba “qué pasa cuando es el propio mando, el que haciendo gala de una dejación total de funciones, está más preocupado de su “carrera” y de su “futuro”que de velar por sus subordinados”.
La situación de las FAS ha cambiado mucho en el transcurso de los últimos decenios, contando actualmente con unos 120.000 efectivos de las diversas armas del Ejército de Tierra, Aire y Armada.
Según Pablo García, “se ha creado una brecha entre los diversos empleos militares, que propicia la aparición de personas que llegan abogar por un tipo de asociación sindical de las FAS”, aunque, “según nuestra modesta opinión”, continúa, “no creemos en sindicatos dentro de las FAS, y mucho menos sindicatos encubiertos, y por lo tanto estaremos enfrente de todos aquellos que promulgan el sindicalismo militar, pero también estaremos enfrente de aquellos que anteponen su carrera al bienestar de sus subordinados y de aquellos que estando en activo tienden a callar y no tomar parte activa en los cambios que requieren las FAS”.
Los principales objetivos que persigue la Asociación son los de honrar la vida cotidiana del militar en sus diversas facetas. No hay guerras en las que entregar la vida por la patria, pero sin embargo si hay un sinfín de sinsabores para estos servidores del Estado, un tipo especial de funcionarios muchos de los cuales no ha tenido medallas ni funerales honrosos pero que no dejan de entregar su vida al servicio de numerosas situaciones como cambios de destino, largos periodos fuera del hogar en una misión, maniobras, a los servicios o a las largas horas de oficina para poder estar un día más con la familia y un día a día complicado. Una asociación que ya está promoviendo la afiliación de nuevos miembros.
Entre los fines de esta nueva asociación profesional están los de presentarse ante la Sociedad como una Asociación diferente de militares, para lo que se proponen transmitir seguridad y confianza; proponerse como una voz de la experienciapara dar visibilidad a los problemas a los que se enfrentan los miembros de las FAS, especialmente para aquellos colectivos abandonados por la nueva normativa, como por ejemplo el personal que tiene que abandonar las FAS al cumplir los 45 años, con un notable impacto sobre sus familias y su futuro profesional.
Otro objetivo importante, relacionado con el anterior, es el de crear una bolsa de empleo Sapromil y desarrollar, mediante acuerdos con empresas, un panel con ofertas y demandas de ocupaciones profesionales que ayuden al Militar a la obtención de un nuevo puesto de trabajo y ofrecer asesoramiento jurídico.
Militares nace con la vocación de no abandonar a nadie en el duro campo de batalla que es el día a día. “Creemos -afirma Pablo García-, en los valores que sustentan a nuestra institución, como la Lealtad, el Honor, el Compañerismo, la Abnegación o el Sacrificio”, aunque saben que aparte de estos valores que les resistir moralmente ante las situaciones más complicadas, también se necesita una resistencia física en este “campo de batalla” que es la vida diaria del soldado profesional.
Según Pablo García, “Militares” no nace “con el propósito de llevar a cabo acciones sindicalistas ocultas, nacen con el objetivo de crear una asociación fuerte desde la que además de todo lo anteriormente mencionado, consiga los apoyos necesarios para que la vida del militar profesional sea más fácil para él y sus familias”.
Militares ha puesto en marcha una página web, Asociación Militares - Luchando por lo nuestro también te defenderemos a ti (asocmilitares.es), aún en proceso de construcción donde no sólo podrán obtener información para asociarse, sino que podrán descargar carteles, y documentos de difusión, podrán trasladar sugerencias y obtener información de la Carrera Militar.