Sin embargo, la obra más destacada del artista fue la que realizó con Osborne, vistiendo con diamantes de Swarovski sus emblemáticos toros, además de inundarlos con trazos de sus escrituras, el signo más característico del artista.
Estas míticas vallas de carretera, rediseñadas por el autor hace diez años, forman parte de manera permanente del museo de la Fundación Osborne, que tiene como objetivo la conservación y difusión del Patrimonio propiedad de la empresa, que cuenta con más de 250 años de historia. En esta ocasión, en “Carigrafía”, Willie Márquez ha intervenido nuevamente la piel del Toro de Osborne, otorgándole una visión artística llena de color, movimiento, y donde prima la solidaridad, ya que los beneficios de la venta de estos trabajos se destinarán a la financiación de proyectos sociales que la Fundación Osborne apoya, con la finalidad de facilitar la incorporación de los jóvenes al mundo laboral.
Los grabados caligráficos, que destacan por su singular identidad artística y su trazo fino y sugerente, y que han formado parte de los escaparates de Hugo Boss, la botella de Stolivnaya, la sala Pacha Ibiza o de los videoclips de Niña Pastori, entre otros, se pueden descubrir hasta el próximo 16 de abril en la Galería María Porto, en El Corte Inglés de Castellana.