La traumatología es un área de la medicina encargada de diagnosticar, prevenir y tratar las diferentes lesiones y enfermedades que se relacionan con el sistema musculoesquelético, el cual incluye huesos, articulaciones, tendones, ligamentos, nervios y músculos.
Actualmente, la traumatología es una de las especialidades médicas en las que más ha logrado avanzar, gracias al uso de novedosas tecnologías que han mejorado significativamente la calidad de vida de una gran cantidad de pacientes a lo largo del mundo, reduciendo no solamente las complicaciones sino también los tiempos de recuperación.
Cirugías mínimamente invasivas
La cirugía mínimamente invasiva es aquella que se lleva a cabo introduciendo instrumentos quirúrgicos especiales a través de pequeñas incisiones en la piel, permitiendo tener acceso al interior del organismo sin que sea necesario abrir grandes heridas. Esta innovadora técnica proporciona diversos beneficios como una disminución en la pérdida de sangre, un menor daño de los tejidos, una probabilidad de infección mínima y una recuperación más veloz.
Un ejemplo de cirugía mínimamente invasiva es la colocación de prótesis de cadera a través de la técnica de abordaje directo superior, la cual es capaz de alterar lo mínimo posible las estructuras fundamentales de la cadera. Sin embargo, se puede aplicar a numerosos tipos de intervenciones, como la artroscopia, la colocación de prótesis articulares o la fijación de fracturas.
En este sentido es oportuno mencionar trabajo que están realizando en el centro de Traumatología Soler, una clínica con más de 20 años de servicio, especializada en el diagnóstico y tratamiento de patologías traumatológicas, la cual brinda la oportunidad de beneficiarse de este tipo de tratamientos con profesionales médicos cualificados y de alta calidad.
Asimismo, en Traumatología Soler podrás tener acceso a las últimas técnicas e innovaciones en traumatología, especialmente en el ámbito de la cirugía mínimamente invasiva. Todo ello con la finalidad de obtener los mejores resultados funcionales y estéticos para la salud y el bienestar.
Implantes personalizados
Otro de los avances tecnológicos más innovadores y funcionales en el campo de la traumatología es el uso de implantes personalizados. Estos se encuentran diseñados y fabricados específicamente para adaptarse de manera adecuada a las características anatómicas y funcionales de cada paciente.
Estos implantes personalizados pueden ser elaborados a través de técnicas como la impresión 3D, utilizando imágenes obtenidas por resonancias magnéticas o tomografía computarizada, consiguiendo así un ajuste especial entre el implante y el hueso del receptor, lo que mejora significativamente los resultados tanto estéticos como funcionales, evita la inestabilidad y el desgaste del implante y minimiza el riesgo de infecciones o rechazo.
Los implantes personalizados pueden ser utilizados con la finalidad de reemplazar articulaciones perjudicadas por artrosis o traumatismos, como la rodilla, el hombro o la cadera, o para la reconstrucción de defectos óseos provocados por infecciones o tumores. Además, también es posible implementarlos para corregir deformidades congénitas o adquiridas como, por ejemplo, la escoliosis o el pie zambo.
Medicina regenerativa
Por último, otro avance que ha logrado destacar enormemente entre los traumatólogos de todo el mundo es la utilización de medicina regenerativa. Esta técnica utiliza células madre, factores de crecimiento o biomaterial para promover la regeneración de los tejidos afectados por enfermedades o lesiones.
Estos agentes biológicos utilizados para llevar a cabo las técnicas de medicina regenerativa pueden ser obtenidos del propio paciente o de donantes y, usualmente, se administran a través de inyecciones locales o sistémicas, o a través de dispositivos que se implantan en el organismo del paciente para liberar progresivamente el producto.
La medicina regenerativa posee aplicaciones potenciales en numerosas áreas de la traumatología, como la curación de fracturas complicadas o no consolidadas, la sanación de lesiones articulares, la prevención de la osteoporosis o la artrosis, y mucho más. Algunos de los ejemplos más populares de productos regenerativos para este tipo de tratamientos son el plasma rico en plaquetas, el colágeno y el ácido hialurónico.