Ya se han entregado certificados de reparación a 21 personas como víctimas de la dictadura franquista, (me parecen muchas después de 60 años, la verdad) y como toda charlotada monclovita que se precie, también se ha creado un Alto Comisionado, comité de expertos y chiringuitos de turno para colaborar con todas las administraciones en la celebración de las citadas actividades, que se celebrarán "en escuelas, calles, teatros y museos". Es decir, metiéndose de pleno en el negociado del joven Trotskista, que poco a poco ya estaba consiguiendo su propósito: Alborotar a propios y ajenos con sus propuestas rescatadas de aquellos manifiestos añejos del DOCUMENTA KASSEL de los años 70.
Así, el Primer Ministro, nuestro Number One por derecho propio, ha decidido en lo que a Cultura se refiere, que el 2025 sea el año para recordar que Franco se murió hace 50 años, ya sea para que el PSOE capitalice el relato de la resistencia al régimen o ya sea para tapar sus miserias.
Yo me he preguntado a menudo si esto de la Memoria Histórica, no sólo fue una perversidad de Zapatero para renovar a un PSOE demasiado socialdemócrata y encabronar al personal, sino también un intento de ocultar y silenciar que durante el franquismo, el PSOE “estuvo de vacaciones” y que el PCE fue el único que dio el callo en aquello de la lucha clandestina y si me apuran, que lo de la Memoria Democrática, no es más que una pataleta asamblearia universitaria neo comunista pija, y que suelen terminar con unas cañas machirulas en los bares de la Latina, reeditando las tradicionales y fraternas (o fraticidas), relaciones entre socialistas y comunistas en España.
El joven Urtasun anunciaba ingenuamente en la página oficial del Ministerio de Cultura sus planes para el 2025 al 2028 y cito: “impulsar la internacionalización de las producciones culturales y creativas españolas y el diálogo de la cultura española en el contexto de la cultura global”. Este plan, tendría tres líneas estratégicas: Derechos culturales y acceso a la cultura como bien público mundial; Relaciones internacionales y diplomacia cultural como herramienta para la paz y Promoción e internacionalización de las industrias culturales y creativas. Es decir, la palabrería hueca habitual del muchacho, y subvención y promoción del cine español de los colegas, como se viene haciendo de toda la vida.
Y ahora viene el Number One y declara el 2025 el Año de Franco, se convocan 454 plazas en el Ministerio de Cultura, (regularizando a los colocados a dedo) y una inversión de más de 80 millones de euros para la rehabilitación de 93 monumentos del Patrimonio Histórico español sin que se sepa, si éstos son colonialistas, discriminatorios, racistas o patriarcales, o si no es otra que una promesa electoral más en las cinco comunidades autónomas que quiere recuperar. Y eso, entiéndanme, cabrearía al más pinturero y sobretodo, si todavía se cree que ministrea y encima le chafa y ningunea la soplapollez de la universalización de la cultura como herramienta de paz y bien público mundial.
Tanta internacionalización por parte de Urtasun, me suena más a patada en el culo, en plan Manuel Fraga. A esto añádele la otra patada pa arriba, que ha dado Salvador Illa a la mujer-compañera-pareja de Urtasun, una tal Saray Espejo Benito (cada cual que se llame como quiera, pero ese nombre no es de pija de Sant Gervasi) nombrándola Directora de Igualtat en la Generalitat, con un sueldo de 90.000 € al año, sirva o no para el cargo.
Todo huele a jubilación prematura y chalet en Llançá, y dejar las portadas al Number One y su juguetito, España en Libertad, para su mayor gloria y vanidad que se hincha proporcionalmente a los escándalos que planean sobre su ejecutivo o defenestrados.
O durará hasta las campanadas del año que viene en el que la Pedroche, nos sorprenderá con un furry de vello púbico, reivindicando el derecho de la mujer a no depilarse la ingle.
Si (
No(
