Desde Barcelona, Isabel y Agda, madre e hija, se han lanzado a la aventura de la creación de pendientes y complementos que resalten la naturaleza, algo que durante el año pasado se ha hecho de forma casi inconsciente tras pasar tanto tiempo en casa.
Es por ello que su apuesta pasa por llevar la frescura de las flores en el día a día o en los eventos más señalados.
“Cada pieza es única porque todo el proceso es artesanal. Volvemos a la esencia de los setenta, pero reinventándolo para la mujer del siglo XXI, que quiere llevar sus flores preferidas cada día con ella sin renunciar a la moda o a la originalidad. Es conectar en la rutina con la naturaleza y dejar que hable de una misma” explican.
Las flores que compondrán los nuevos modelos de su próxima colección están seleccionadas con mimo y atendiendo tanto a la flor de temporada como la rosa, por ejemplo, como a la propia calidad y pétalos de mismas. Pero la novedad viene en su combinación con minerales.
“Cada mujer es un mundo y busca hablar a través de sus complementos. Nuestros pendientes, coleteros, collares o pulseras están hechos específicamente para cada una de las mujeres que los encarga. Eso los hace irrepetibles” comentan.
Hortensias, margaritas, amarelino, craspedia o gyphsophilias son solo algunas de las que ya tienen disponibles en su catálogo. Solo una recomendación, al guardarlas, alejarlas del sol directo y la humedad. Por el resto, es el momento de apostar, de nuevo, por incluir las flores en el día a día.