El restaurante Bar de Fuegos se proclama como el restaurante de moda de Chueca, gracias a su propuesta de cocina en la que los fuegos son los grandes protagonistas. Y aunque ofrecen una amplia variedad de platos a la brasa, hay opciones para todo tipo de paladares.
Bar de Fuegos consolida su apuesta gastronómica en la capital, en la Calle de Barbieri, número 7, donde permanecerá abierto de martes a domingo, de 13:00 a 16:00, y de 20:00 a 0:00. Los equipos de cocina y de sala han estado al pie del cañón desde su apertura el pasado mes de mayo, y están preparados para recibir con muchas ganas a todos los aficionados a la buena mesa y de las brasas que se acerquen al céntrico barrio de Chueca. El restaurante se presenta a sí mismo como un lugar donde disfrutar de buena comida, rústica y exquisita. Con un concepto clásico, atemporal, simple, y desenfadado, pero a la vez sofisticado y diferente, su cocina es apta para todos los públicos. Los fuegos son los grandes protagonistas, la cocina al carbón es abierta, tanto la parrilla como el horno, de forma que los alimentos están a la vista del comensal, que también puede observar la destreza de los parrilleros en acción.
La cocina del chef argentino Mauricio Giovanini se caracteriza por el gran conocimiento del producto, al que aplica su experiencia durante años al frente de Messina (estrella Michelin en Marbella) y el dominio de la técnica aprendida. El chef ofrece un amplio repertorio de platos elaborados en parrillas de leña y carbón, a base de productos procedentes tanto del mar como de la tierra.
Los amantes de la carne y los vegetarianos encontrarán aquí su plato preferido. En la carta de Bar de Fuegos conviven en armonía bocados para picar como la chipá o los nems de langostinos, con verduras como la coliflor asada con especias y crema de kimchee; y ensaladas como la Don Rescoldo, con cebollas y pimientos asados.
A la brasa disponen de carnes variadas como la entraña, el lomo alto argentino, las mollejas de corazón, el picantón o la pluma y la presa Ibéricas; hamburguesas y, por supuesto, también pescados como la lubina, el rodaballo o el lomo de atún.
Los bocadillos o entrepanes a la parrilla de presa ibérica, de ternera, de panceta o de setas también son una buena alternativa. Además, resultan ideales para compartir.
Para los más golosos, se propone el plátano a la parrilla con dulce de leche y chocolate o la tarta cremosa de chocolate con helado de vainilla, y para los que prefieren los postres más ligeros, pero también deliciosos, el budín de brioche y coco o la piña a la parrilla con soda de lima y pisco.
Como novedad en Bar de Fuegos, esta próxima temporada disponen de dos menús ejecutivos diferentes, por un precio de 19,50€, que incluyen tres platos a elegir entre varias opciones: un entrante, un principal y un postre. Esta propuesta estará vigente de lunes a viernes, de 13:00 a 16:00 horas, e irá cambiando cada semana, de modo que los comensales puedan disfrutar de la diversidad de la carta en un ambiente cosmopolita e informal.
El diseño interior y la decoración corren a cargo de Pato Duhalde que, acostumbrado a trabajar con habilidad en el sector de la restauración, ha creado un proyecto particular en el que la cocina vista obtiene todo el protagonismo.
El desafío ha sido partir de ese lugar central y de la barra como piezas fundamentales, para diseñar alrededor toda la estética del espacio y que el conjunto funcione. El resultado ha sido un concepto informal, divertido y desenfadado, en el que el fuego está concebido como elemento mitológico.