Un panel, celebrado en el club de mujeres Juno House y organizado por Urban Sports Club, reúne a directivas para analizar el rol de la mujer en la gestión de equipos y en el desarrollo de un liderazgo enfocado en el equilibrio y el bienestar. Paula Fernández-Ochoa, socia de MoreThanLaw+ y VivircorRiendo; Silvia Rivela, cofundadora de DOWE y Femal Startup Leaders; Drolma Lizcano, CEO de Alqvimia; Liana Grieg, cofundadora de Juno House; y Araceli Escobedo, Head of Marketing España y Portugal de la plataforma deportiva organizadora, debatieron ante cerca de un centenar de asistentes sobre las soft skills del liderazgo femenino. Según el último estudio Woman in Business llevado a cabo por la consultora Grant Thornton, el 31% de los puestos directivos a nivel mundial son ocupados a día de hoy por mujeres. Una tendencia al alza que, según los mismos datos, parece haberse incrementado y reforzado a raíz de la pandemia. ¿Las razones? Mayor empatía, más capacidad de adaptabilidad al cambio y un nivel más elevado de resiliencia. Estas fueron algunas de las conclusiones del panel El papel de la mujer directiva en la gestión del bienestar en la empresa, que organizó Urban Sports Club, la principal plataforma deportiva de Europa, en Juno House, el nuevo club para esas mujeres empresarias y directivas, y de un liderazgo más amable y flexible.
El panel, liderado por la periodista Cecilia Martínez, arrancó con la definición de lo que era el foco central de la cita: el bienestar. La unanimidad de su visión también formó parte del arranque de la sesión. Todas las participantes coincidieron en el equilibrio de las condiciones laborales y el espacio de trabajo, y el bienestar interior, como elementos clave hacia el bienestar en el entorno laboral. Preguntadas por las diferencias entre el liderazgo femenino/masculino fue Araceli Escobedo, head of marketing de Urban Sports Club, quien resumió el sentir general de sus compañeras de mesa. “Solemos favorecer organizaciones con mayor bienestar y priorizamos estrategias más empáticas y más centradas en la salud de los empleados”. En este sentido, desde su puesto como CEO de Alqvimia, Drolma Lizcano apuntó hacia “la necesidad de un liderazgo cooperativo, no competitivo” entre mujeres y hombres.
Otro de los puntos abordados durante el panel fue el bienestar como piedra angular del éxito. “Considero que la clave está una vez más en el equilibrio en todas tus facetas”, apuntó Paula Fernández-Ochoa, desde su experiencia directiva. “Es esencial cuidarnos y educarnos para lograr aquello que consideremos éxito”, desarrolló. Ante el papel que ejercían las empresas en el bienestar y salud de sus equipos, Sílvia Rivela, desde su expertise en compañías del sector tech, se refirió a la “responsabilidad social de las empresas para conectar a los equipos y mantener una escucha activa para descubrir qué necesitan y qué quieren las personas que forman nuestra empresa”.
La gestión del tiempo
Uno de los puntos que se desarrolló durante la segunda parte es la conciliación de los roles desarrollados por las mujeres en el ámbito laboral. “En Urban Sports Club hemos detectado que, sobre todo tras la pandemia, se valora más el tiempo”, comentó Araceli. Una realidad que argumentó Liana Grieg, una de las socias fundadoras de Juno House. “Percibimos que la gente quiere aprovechar más el tiempo. Si un meeting se alarga, se divide en dos días diferentes. Se sigue, pero en otro momento”.
Todas las panelistas coincidieron en los cambios que la tecnología ha supuesto para ese valor de adaptabilidad al cambio, latente durante toda la sesión. “Por ejemplo, durante la pandemia, conseguimos una pronta digitalización de nuestro modelo de negocio en solo 15 días. De esta manera, nuestros partners pudieron seguir manteniendo sus ingresos”, explicó la Head of Marketing de la plataforma deportiva.
Deporte, bienestar y salud mental
El tercer bloque del panel puso en relieve la importancia del deporte como mecanismo de bienestar físico y mental. “Muchos de los valores del deporte son extrapolables a las empresas”, apuntó Fernández-Ochoa. “Además, se ha comprobado que los trabajadores que practican deporte con frecuencia incrementan su rendimiento en un 31%”, desarrolló. Como técnica de gestión de tiempo que aúna deporte y trabajo, Rivela puso de manifiesto los llamados “walking meetings”, a modo de circuito caminando para fomentar la creatividad.
Cambios a ritmo lento
En el bloque para conclusiones y previsiones a medio plazo, las panelistas se mostraron esperanzadas con el progreso y desarrollo de estos cambios comentados durante la charla, derivados hacia el bienestar y la conciliación ámbito laboral/ámbito personal. No obstante, Rivela sí se mostró algo más pesimista. “Las empresas tienen que entender que si quieren ser competentes, tienen que saber evolucionar. Tener una oficina híbrida no lo es todo”.