Sociedad

Un informe pericial exonera de responsabilidad a Clínica CEME en el ‘caso Silvia’

LAS BACTERIAS PROVIENEN DE LA FLORA INTESTINAL DE LA PACIENTE

· El caso puede haber dado un vuelco en su investigación. La infección por la que Silvia estuvo en coma no es de origen hospitalario, sino que procede del organismo de la propia paciente

Redacción | Jueves 28 de julio de 2022

Es la última novedad en el caso de la clínica CEME y su causa está en un informe pericial, presentado por el centro médico, que descarta mala praxis en la operación de cirugía estética que se practicó a Silvia Idalia. Según el informe que ahora aporta la defensa, la infección por la que Silvia estuvo tres meses en coma inducido no guarda relación con su paso por la clínica, sino que procede del organismo de la propia paciente, lo que exculparía a los médicos que la operaron. El citado documento lleva la rúbrica del jefe de Enfermedades Infecciosas del Hospital Ramón y Cajal, Don Javier Cobo Reinoso y, por consiguiente y de acuerdo a los términos en los que ha sido elaborado, mantiene al margen de toda responsabilidad a los dos facultativos y a la propia clínica, que no habrían actuado bajo criterios de imprudencia, como se les acusó.



La mujer de 34 años, como es sabido, se sometió a una operación de estética el pasado 29 de abril tras la que fue dada de alta, pero luego sufrió una infección y fue trasladada grave al Hospital La Paz, donde permanece aún hoy en Cuidados Intensivos.

En las últimas semanas su estado ha mejorado y se le retiró la sedación, pero está pendiente de varias cirugías en la parte del cuerpo afectada por la infección. En este último documento, se concluye en términos literales que “no se deduce infracción de la ‘lex artis’ médica en los profesionales sanitarios que atendieron a la paciente hasta su traslado al Hospital La Paz (…) las bacterias no son de adquisición hospitalaria ni transmitidas a partir de personal o el entorno sanitario, sino procedentes de la microbiota (flora) de la paciente”.

En relación a la intervención en la clínica, la pericial fija que la paciente fue atendida por personal de CEME en un hospital, “realizándose exploración de las heridas, tomas de constantes y exploraciones analíticas”. El documento corrobora lo que CEME señaló hace semanas: “fue una desgracia, pero la operación estética fue correcta”.