El principal ganador de este año es el dólar (USD) y todos los activos denominados en esta moneda. En lo que llevamos de año el Dollar Index (índice de referencia del billete verde) lleva una rentabilidad de más del 19%, con el Euro (EUR) más de un 16%, con la libra (GBP) más de un 20% pero es que la subida es más abultada en el caso de las divisas asiáticas; más del 25% en el caso del yen japonés (JPY) y 14% con relación al yuan chino (CNH). Especial preocupante en este último caso porque desde este miércoles está superando los máximos de los pasados años 2019 y 2020. Estamos hablando de que el EURUSD se encuentra en mínimos de 2002, GBPUSD en mínimos casi históricos de 1985 o USDJPY máximos de desde 1998 (24 años).
Es tal el desproporcionado nivel al que está cotizando en relación con algunas divisas, que sin ir más lejos la semana pasada Japón tuvo que intervenir el mercado de divisas comprando yenes para soportar, aunque sea temporalmente, su divisa. En aquel día tuvo el USDJPY un rango intradiario entre 140 y 146. Vemos bastante factible en este sentido que otros países asiáticos, como China o Corea del Sur, puedan hacer lo mismo en un plazo de tiempo relativamente corto para frenar la devaluación de sus respectivas divisas. Además, todo esto está haciendo que algunos países que histórica y estructuralmente eran meros exportadores, como Alemania o Japón, hayan pasado durante los últimos meses a tener una balanza por cuenta corriente históricamente deficitaria por la respectiva devaluación de sus monedas y los altos costes de importación que están soportando.
Difícil encontrar un activo a modo de refugio en el contexto actual, los inversores no ven suficiente la rentabilidad ofrecida por los bonos en estos momentos, aún con la subida de las últimas semanas en rentabilidades, dado el contexto que tendremos durante los próximos 12-24 meses con relación a la previsible y fuerte subida en tipos de interés. Recordemos que los tipos en EE. UU. estaban al 0% hasta marzo de este año 2022 y desde entonces los han subido hasta el rango actual 3 – 3,25%. El bono americano a 10 años ofrece a precios de mercado rentabilidades anuales del +4% anual aproximadamente, pero la subida ha sido más agresiva en la parte corta de la curva (de ahí la inversión actual de la misma) por ejemplo el bono americano a 2 años da rentabilidades del 4,20%, niveles de 2007. En este sentido, parece que EE. UU. va un paso por delante que el resto de Banco Centrales en el transcurso de subir tipos de interés en comparación al resto de países.
Como dato más importante esta semana en EE. UU. tendremos el dato de PCE hoy viernes (dato de inflación que sigue la FED) el cual no se espera que sea muy bueno porque estima el mercado un aumento en PCE subyacente desde 4,6% a 4,7% lo que no a ayudará a priori a dar un poco de soporte al mercado. Teniendo en consideración todo esto y enfocándonos en el EURUSD, todavía queda un rango bastante amplío para llegar a los mínimos del año 2002 (0,8220, un 14% aproximadamente desde precios actuales) pero todo apunta a que vamos en aquella dirección. En el corto plazo, tras la caída de algo más de un 1,5% en lo que llevamos de semana, tomar en consideración los niveles de 0,97-0,9750 (máximos semana) como posibles resistencias de corto plazo para plantear posiciones cortas con el cruce.