El objetivo principal de esta iniciativa gubernamental es otorgar subsidios a autónomos y pymes para que instalen soluciones digitales para mejorar sus habilidades. La digitalización trae un abanico de ventajas, independientemente del estatus, y con ayudas que van desde los 1.000€ hasta los 12.000€ a través del Kit Digital León, esta financiación está íntegramente destinada a dar pasos importantes en la madurez digital.
El programa está dirigido a empresas y autónomos que cumplan unos requisitos establecidos y estén interesados en implantar soluciones digitales que les permitan mejorar su capacidad de adaptación a los retos del futuro relacionados con el desarrollo tecnológico.
Además de contribuir a la modernización y al crecimiento económico general de León, las operaciones digitales tienen grandes ventajas en términos de productividad y optimización de recursos.
Actualmente, la presencia en Internet es un medio importante para llegar al público objetivo y atraer clientes, y también es muy eficaz para atraer talento.
Enfatice que las subvenciones no se otorgan a la comunidad de bienes u otro tipo de entidades. El programa requiere la operación de un agente digital certificado. Este servicio incluye solicitudes de prestaciones y trámites administrativos.
Obtener asesoramiento en cada paso del proceso es esencial. Aunque existen diferentes opciones, confíe en León Kit Digital - Sinceridad SL para garantizar el trabajo puntual de nuestros agentes profesionales y sin honorarios.
Contactar a la empresa es fácil, solo da click en su portal oficial https://www.leonkitdigital.com para conocer todos los detalles, o personalmente en la oficina ubicada en Av. Independencia, 1, 2º, 24003 León.
Para poder solicitar la subvención, el primer requisito es ser Autónomo, Microempresa o Pyme, es decir, apto para uno de los siguientes tres segmentos: PYMES de menos de 3 empleados y autónomos, PYMES de 3 a 10 empleados o PYMES de 10 a 49 empleados, además del cumplimiento de sus respectivos límites financieros.
Asimismo, es necesario estar en situación de alta, al día en las obligaciones tributarias y de seguridad social. Se rechazarán las solicitudes de cualquier empresa que se considere en crisis o que trabaje por cuenta propia o que esté sujeta a una orden de recuperación pendiente de la Comisión Europea.
Si bien la pandemia de COVID-19 ha acelerado en gran medida la digitalización de muchas empresas, para las pymes todavía queda un largo camino por recorrer.
Las subvenciones se plantean como una solución dirigida a mejorar diferentes áreas del marketing online, aspecto clave para autónomos, pequeñas y medianas empresas que buscan presencia en Internet.
Ya sean pequeños o grandes, poder digitalizar sus operaciones tiene una serie de ventajas, empezando por la optimización de la productividad. Los recursos se utilizan con fines de lucro y el trabajo se vuelve más flexible.
Otra gran ventaja de ser beneficiario de una subvención es la automatización de múltiples tareas. Los empleados son libres de dedicar su tiempo a otros proyectos que son valiosos para la empresa y brindar un mejor servicio a los clientes finales.
Si encomendamos a la tecnología las tareas más repetitivas y burocráticas, aumentamos el enfoque estratégico de nuestros empleados. Los profesionales tienen la flexibilidad de diseñar planes de acción a corto y mediano plazo, así como demostrar sus conocimientos y probar o mejorar sus habilidades.
Los ajustes provocados por la digitalización de las empresas afectan su nivel de agilidad, con operaciones más enfocadas y procesos que avanzan más rápido.
En conjunto, estos aspectos tienen un impacto en la rentabilidad, ya que minimizan el riesgo de errores o fallas y los costos correspondientes que estos pueden acarrear. La información interna y de los clientes se almacena y administra a través de una base de datos protegida.
La confidencialidad de la empresa está garantizada y sus operaciones permanecen encriptadas para máxima seguridad, reduciendo la posibilidad de comprometer la estabilidad de la misma y/o de los clientes ante la pérdida de información o, peor aún, la divulgación de datos relevantes.