Sociedad

Luis Enrique no ha engañado a nadie

Paco Cecilio.

FIEL A SU FILOSOFÍA

· Por Paco Cecilio (@PacoCecilio)

Sábado 10 de diciembre de 2022

Se ha mantenido fiel a su idea de juego y a su filosofía. La mejor manera de que no te ataquen es tener el balón. Esa filosofía de juego nos dió dos títulos europeos y un mundial. La gran diferencia, la generación de futbolistas. Aquella generación no se repetirá en muchos años. El día de Costa Rica, dos horas antes del encuentro y al saberse la alineación, le llovieron los palos. Rodrigo de central, para que había llevado a tres centrales si no confiaba en ellos. Morata de suplente, para que había llevado sólo un delantero centro y no le alineaba. Asensio titular cuando no es delantero centro puro. ¿Quien iba a meter los goles si no tenemos referente arriba?



Sin embargo, España hace desde el mismo pitido inicial el mejor partido que se recuerda últimamente y golea a Costa Rica. Entonces, Luis Enrique era menos que un genio porque había acertado con la alineación.
Una buena primera parte ante Alemania y una segunda regular pone de nuevo todo el foco en Luis Enrique. El partido de Japón fue definitivo. Empezamos bien, nos adelantamos pronto en el marcador y ahí empezó el principio del fin.
Todos los equipos nos juegan igual. Sabedores de nuestro aplastante dominio del balón se encierran atrás en dos líneas de cinco con apenas quince metros de separación entre ellas y empieza nuestro agobio. Ahí si se le puede recriminar a Luis Enrique no tener un plan B.
A los equipos que nos juegan así hay que atacarles de otra manera. Hay que finalizar jugadas para darles la opción de sacar de nuevo de portería. Si lo hacen en corto, presión alta y posibilidad de robo de balón con la defensa descolocada. Si lo hacen en largo, robo de balón y contraataque. Tenemos extremos veloces como Dani Olmo, Ferrán Torres, Ansu Fati, Yeremi Pino, Sarabia y Nico Williams.
De esto último es lo único que se puede reprochar al entrenador, no haber activado un plan B en casi 130 minutos contra Marruecos. De todo lo demás, ya estamos advertidos. Luis Enrique no ha engañado a nadie. Así ha sido su estilo de juego siempre. Lo que no le perdonan, aunque no lo reconocen, es su pasado blaugrana después de renegar de su paso por el Real Madrid. Hay gente en la vida que cae simpática y otra que no. A estos últimos pertenece Luis Enrique.
El problema de España no es Luis Enrique, no nos engañemos. Podía haber traído a otros jugadores, pero el resultado final hubiera sido el mismo. Ahora no vale decir que Iago Aspas, Borja Iglesias, Canales o Fabián Ruiz, entre otros, había sido la solución. No tenemos jugadores que marquen la diferencia a nivel europeo o mundial.
La Liga española es una “bacalá” donde quitando Real Madrid, Barcelona y poco más, los demás equipos no tienen excesivo nivel. Estamos muy lejos de la Premier, potente económicamente, y del resto de ligas europea. Prueba de ello es que sólo Real Madrid sigue vivo en Champions League. Y Del Real Madrid sólo hay dos jugadores seleccionables por España, Carvajal y Nacho.
Se ha criticado muchísimo los porteros. No hay mucho más donde elegir. Real Madrid, Barcelona, Sevilla, Atlético de Madrid, Villarreal, Betis, Valencia, Rayo Vallecano, Cádiz… tienen porteros extranjeros. ¿A quien convocar? A dos españoles que tuvieron que emigrar. Y así con muchísimos más jugadores. Los equipos importantes están plagados de extranjeros. De ahí las convocatorias de Sarabia, Carlos Soler, Rodrigo, Laporte… jugadores que emigraron y juegan fuera de nuestra Liga.
Y ahora que se pide la cabeza de Luis Enrique pensamos que Luis de la Fuente es la solución. Aun recuerdo el experimento de Iñaki Sáez en la Eurocopa de Portugal. La Federación tiene un límite salarial para la contratación de un seleccionador y eso hace que se limite mucho los posibles candidatos. Con Luis Enrique y su staff se hizo un esfuerzo y una excepción. Ahora no se hará y nos conformaremos con un hombre de la casa que ha hecho un buen papel en la sub 21, pero la absoluta es otra cosa.
En cualquier caso, somos españoles y debemos estar orgullosos de nuestro equipo nacional. Pero estamos a mucha distancia de Francia, Brasil, Inglaterra e, incluso, Portugal. A quien ganamos hace poco en Braga en la Nations League.
Y por último, en los vestuarios hay un código no escrito. Se llama jerarquía, personalidad y carisma. Luis De La Fuente ha sido un buen entrenador de categorías inferiores con chavales jóvenes y en formación. La absoluta es otra cosa. En la absoluta se va a encontrar con futbolistas de élite y muy bien pagados en sus clubs. Hacerles ver que él es el líder y convencerles de sus planteamientos no será tarea fácil. El futbolista sabemos todos cómo es y más de uno dirá:” ¿Con quien ha empatado este? Al tiempo…
Todavía recuerdo cuando Rafa Benítez le quiso enseñar a Cristiano Ronaldo a tirar faltas. Cristiano le miraba con cara de alucine. Fue al presidente a decirle que había que echarlo… y lo echaron.