“Las mujeres todavía se suelen encontrar con más obstáculos que sus familiares varones a nivel profesional y dentro de su propia familia cuando trabajan en la empresa familiar. Sobre todo, en pequeñas ciudades y en zonas rurales, vemos que los padres suelen preferir que el relevo generacional pase a los chicos de la familia, especialmente para el primogénito, aunque es algo que poco a poco va cambiando”, indica Agustín.
La cifra de mujeres que ocupan puestos directivos (35%) o en el Consejo de Administración y/o Asesor (29%) de una empresa familiar es ligeramente mayor. Ambas cifras también se han incrementado en los últimos cuatro años, dado que en 2019 se situaban en el 33% y el 27%, respectivamente.
Por otro lado, en cuanto a la selección de personal, la cifra es más igualitaria. El 40% de los clientes de Family Business Solutions que han hecho un proceso de selección externo para cargos directivos en los últimos 3 años han terminado incorporando a una mujer para ocupar la vacante.
En lo referente a la brecha salarial en las empresas familiares, Agustín indica que, si bien esta brecha todavía existe, se está reduciendo paulatinamente y subraya que la concienciación respecto a esta cuestión es superior en las grandes ciudades y en aquellas empresas familiares en las que mujeres de la familia han llegado a ocupar cargos en la dirección general o en el órgano de administración.