El Banco Central Europeo se ha reunido este jueves por segunda vez en 2023 y ha subido 50 puntos básicos los tipos de interés. De ese modo, quedan establecidos en el 3,5%, una cifra no vista desde el año 2008. Acompañada de esta subida, y aunque no exista una correlación exacta entre ambos índices, el euríbor se dispone con paso inestable en valores cercanos al 3,5%. “La tendencia al alza del euríbor estaba sobrepasando todas las previsiones realizadas a principios de año, hasta esta última semana”, señala César Betanco, experto hipotecario de Hipoo.
"La preocupación está comenzando a ganar terreno a la cautela debido a todos los sucesos ocurridos los últimos días. Además, aparte de toda esta incertidumbre originada al otro lado del continente, el alza del euríbor ya está provocando subidas tangibles de algo más del 50% en las cuotas mensuales de los hipotecados a tipo variable. Se antoja un panorama con nubarrones muy negros en el horizonte para las economías domésticas”, afirma el experto.
Betanco añade también que lo único que podría evitar una subida tan agresiva como la actual que está ejecutando el BCE sería que el miedo y la incertidumbre generada en el mercado estadounidense con el colapso del Silicon Valley Bank llegase a los mercados europeos de una forma efectiva.
Pérdida de capacidad de compra
Para ejemplificar cómo están afectando las subidas de tipos de interés del BCE, y en consecuencia el alza del euríbor durante el período comprendido entre 2022-2023, Betanco ha realizado un breve análisis con resultados más que significativos y muy poco halagüeños: el español medio ha perdido un 28,6% de capacidad de compra si atendemos al precio de la vivienda al que podía optar a principios de 2022 y al precio de la vivienda al que puede optar en marzo de 2023.
El experto de Hipoo se ha servido de un sueldo medio en España aproximado de 25.000 euros brutos anuales. Lo que equivaldría, aproximadamente, a 19.880 euros netos al año y 1.656 euros netos al mes. De esta cantidad de dinero, se sustrae, por lo tanto, que el ratio máximo aconsejable de endeudamiento sobre este sueldo sería de 579 euros (el 35% del sueldo neto mensual). Así pues, el análisis se ejecutaría de la siguiente manera:
A principios del año 2022, si una persona hubiera firmado una hipoteca fija muy competitiva bien podría haberlo hecho a un 1% de interés. Si se establece que la cuota óptima para un hipotecado era de 579 euros (su ratio máximo de endeudamiento, contando a su vez que el salario medio en España no ha variado prácticamente en este período de tiempo), da como resultado que se podría optar a un préstamo hipotecario por valor de 632 euros. Ajustando esta cantidad, además, al 80% del valor de compra de la vivienda (que es el porcentaje máximo que suelen financiar los bancos), saldría que el valor total de la vivienda que se podría comprar con garantías con ese sueldo y en esos momentos hubiera sido de 192.040 euros.
Sin embargo, hoy, en marzo de 2023, si una persona tuviera que firmar una hipoteca fija, seguramente tendría que pagarla al 4% de interés, aproximadamente. Si, al igual que antes, se establece que la cuota óptima para un hipotecado es 579 euros (contando que no ha variado su ratio de endeudamiento porque tampoco lo ha hecho el sueldo medio en España), da como resultado que se podría optar por un préstamo hipotecario de 693 euros. Ajustando esta cantidad, de nuevo, al 80% del valor de compra de la vivienda, saldría que el valor de la vivienda que se podría comprar con garantías con ese sueldo en estos momentos sería de 137.116 euros. Es decir, un 28,6% menos que hace un año.
La subida del euríbor no solo está afectando a los tipos variables, sino que los tipos fijos también se han encarecido durante este año. Si en enero de 2022 se podía firmar un tipo fijo competitivo al 1%, ahora mismo, muchos bancos han subido su diferencial hasta el 4%. “La subida del euríbor no solo ha perjudicado a las cuotas hipotecarias mensuales firmadas a tipo variable, sino que ha generado también que se haya perdido casi un 29% de capacidad de compra de vivienda, en poco más de un año”, recalca Betanco. Que confirma, del mismo modo, que los próximos meses van a ser muy duros para los ya hipotecados y muy poco accesibles para los que estén pensando en comprarse una casa.