¿Ahorrar dinero disfrazándose? Increíble, pero cierto. Björn Ulvaeus explicó en el libro ‘Abba: The Official Photobook’ que la banda eligió sus inconfundibles looks buscando reducir gastos. La razón es que las leyes suecas permitían desgravar el coste de la ropa, siempre y cuando ésta fuera tan estrafalaria y característica que no estuviera pensada ni pudiera utilizarse en la calle.
En la elección de un animal de compañía también importan los impuestos: impuesto sobre los perros. ¿Perro o gato? Esta es una pregunta que muchas personas se plantean a la hora adoptar un animal de compañía. Y es que en Alemania, la decisión puede estar motivada más allá de gustos personales, ya que a diferencia de los perros, los amantes de los gatos no pagan impuestos. Hay razones históricas para ello. A diferencia de los gatos, que nunca han sido considerados en Alemania como animales de granja -cazadores de ratones y ratas-, en el siglo XIX ya existían impuestos sobre los perros. Hoy en día el impuesto sobre los perros es un impuesto sobre los gastos. Entre otras cosas, pretende contribuir a limitar el número de perros en los hogares.
Afeita y ahorra: impuesto sobre las barbas. Aunque a lo largo de la historia, la barba ha sido comúnmente usada, e incluso, siendo considerada un símbolo de estatus, sabiduría o virilidad, su aceptación por la sociedad ha ido cambiando. Por ejemplo, en ciertas épocas, como la era victoriana, afeitarse y tener una barba limpia era considerado más profesional y civilizado. Por ello, y con el objetivo de controlar la moda y el estilo de la época, varios países implementaron medidas extraordinarias. No obstante, en otras ocasiones, el motivo principal era la recaudación de fondos extra, como el impuesto fue promovido por Enrique VII (siglo XVI), con el objetivo de financiar las campañas militares del rey. La tasa exacta del impuesto variaba según el estatus social y la cantidad de barba que un individuo llevaba. Quienes tenían barbas de longitud moderada debían pagar menos que aquellos con barbas más largas y exuberantes.
Si pides un bagel, mejor sin rebanar: impuesto sobre los bagels. Nueva York es conocida por tener una gran cantidad de tiendas y establecimientos que ofrecen bagels de alta calidad en una variedad de sabores y estilos. No obstante, muchos de los visitantes a la Gran Manzana desconocen que existe un impuesto muy peculiar. Los bagels se consideran alimentos básicos no preparados y, por lo general, no están sujetos a impuestos. Sin embargo, hay una excepción: si un bagel se corta o se le agrega algún tipo de condimento o relleno, se considera una "comida preparada" y estará sujeto a impuestos.
No hay duda de que, a lo largo de su historia, la gestión de impuestos ha dado mucho de qué hablar y ha generado dudas y controversia. Por eso, Taxfix está comprometido con hacer de esta tarea algo sencillo y transparente y busca asegurar que los usuarios tomen, por fin, el control de sus finanzas.