El objetivo no solo es emular a los grandes ganadores en la historia de las apuestas deportivas, sino también mantener un equilibrio saludable en la práctica de este pasatiempo. Consejos para jugar de forma responsable puedes encontrarlos en portales especializados en apuestas deportivas como lamejorcasadeapuestas.es. Dicho eso, veamos casos de apostantes que, contra todo pronóstico, se hicieron de oro con una única predicción.
Aunque es bastante improbable y no hay que dejar nunca abandonada la perspectiva de que se trata de una fórmula para pasar el rato, todo jugador desearía estar en la piel de gente como James Abducci, que apostó por el mítico golfista Tiger Woods cuando estaba pasando por su peor racha. En este caso, la participación tuvo un valor de 85.000 dólares en favor de este deportista durante su intervención en el Master de 2019, ganando con esta apuesta nada menos que 1,2 millones de dólares.
Otro ejemplo perfectamente válido a rescatar de premios supuestamente imposibles se debe al milagro de Leicester en 2015 ganando la Premier League. Se trataba de un título que nadie esperaría que ganase por lo que las cuotas a favor estaban por las nubes. Sin embargo, siempre hay un fanático al que no le importa que todo esté en contra y que sigue confiando en su equipo. Como consecuencia logró un premio de doscientas mil libras.
Por último, recordar el caso de un deportista que también logró un buen pellizco en una apuesta. Se trata del jugador de golf Phil Mickelson, que durante la temporada 2000/2001 de la NFL se decidió por un envite bastante arriesgado, prediciendo que los Baltimore Ravens serían los vencedores de la Super Bowl, acertando de pleno y ganando con ello nada menos que 560.000 dólares.
También en los entornos de juego de casino, donde es posible apostar en juegos como las máquinas tragaperras, ruletas o partidas de póker y blackjack, entre otros, se han dado casos de suerte que cambian vidas. Valga como primer ejemplo el de Cynthia, la camarera que se llevó en el año 2000 el mayor jackpot que un slot haya otorgado jamás. Casi 35 millones de dólares recibió de una máquina tragamonedas en el casino Desert Inn, de Las Vegas.
Don Johnson, un tipo normal, no el actor de Miami Vice, logró en el Casino Tropicanda de Atlantic City, en Nueva Jersey, en el 2011, seis millones jugando al blackjack en una sola noche. A este jugador, no le abandonaría la suerte, acumulando un total de 15 millones durante 2 años, todo un ejemplo de jugador perseverante que sabe aprovechar una racha y que juega con inteligencia. Supo sacar provecho a su experiencia y ganar a la banca, cosa que no es nada fácil.
También los famosos tienen suerte en el juego. Cabe mencionar, en este sentido, al boxeador Floyd Mayweather, que no solo lograría noquear a luchador de artes marciales mixtas Conor McGregor, sino que, siendo un habitual de las salas de juego en Las Vegas, logró sacarle a una máquina tragaperras 100.500 dólares por un gran Jackpot.
Las apuestas de los famosos no son un buen ejemplo para el apostante normal, ya que se invierten grandes cantidades de dinero, fuera del alcance de los jugadores corrientes. Por eso, las apuestas online suponen ejemplos más cercanos con los que te puedes sentir más identificado. Por ejemplo, un fan del anónimo del Manchester United que apostó solo 30 peniques en una extraordinaria combinada de 15 posibilidades, ganando con ello 500.000 libras. Otro aficionado a las carreras de coches apostó 100 libras a que Lewis Hamilton ganaría un campeonato de Fórmula 1 antes de que cumpliera los 25 años, y cobró por ello 125.000 libras, todo un ejemplo de apuesta a largo plazo.
Si hablamos de apuestas en territorio nacional, destaca la de un joven español, que hizo una combinada en la que debía acertar 4 resultados de la ACB y otros cuatros partidos de fútbol de La Liga nacional. El Deportivo – Real Madrid fue decisivo para cumplir con sus pronósticos y llevarse así más de 77.000 euros.
Otra apuesta milagrosa fue la del seguidor del Liverpool que predijo que el futbolista Xavi Alonso marcaría un gol desde su campo en algún momento de la temporada. En efecto, esta diana llegó a ocurrir en un encuentro contra el Luton, las 200 libras que apostó se transformaron en 25.000.
Por último, un caso de una apuesta mínima con grandes resultados. La historia real de alguien que apostó solo 0,44 euros y gracias a una combinada de 3 partidos, todo de remontada en el segundo tiempo, llegó a ganar 39.556 euros.
Son casos extremos de lo que es posible con las apuestas deportivas, pero ello no debe cegarte en la búsqueda del soñado premio. Obtener cantidades así no es algo habitual y la base del juego debe ser la cautela y actuar con frialdad. Mantener las emociones bajo control y cuidar tu bankroll, son las claves para que, de vez en cuando, puedas hacer alguna apuesta arriesgada con la que poder aspirar a un gran premio.