Ante la nueva mesa de diálogo sobre la reducción de la jornada laboral convocada para hoy, la Asociación de Jóvenes Empresarios de Andalucía (AJE Andalucía) se alinea con la posición expresada recientemente por CEOE y CEPYME, manifestando su inquietud y oposición a una medida de carácter general que afecta a las empresas sin tener en cuenta las especificidades del tejido productivo de la región.La autonomía de la negociación colectiva debe ser respetada. AJE Andalucía considera que las modificaciones de la jornada laboral deben ser materia de negociación colectiva entre las empresas y los representantes de los trabajadores, tal como se contempla en el artículo 37.1 de la Constitución Española. La propuesta del Gobierno, al imponer una normativa que afecta a todos los sectores de forma generalizada, contraviene la autonomía de los convenios colectivos, que han sido clave en la construcción de una relación laboral equilibrada y en la preservación de la paz social durante las últimas décadas.
Desde AJE Andalucía, se recuerda que muchos convenios ya están negociando y acordando reducciones de jornada de manera bilateral, adaptadas a las necesidades de cada sector y de las propias empresas. Imponer una norma de ámbito general no solo dificulta esta flexibilidad, sino que también limita la capacidad de adaptación de cada empresa a su contexto particular.
El impacto en las pymes y autónomos: un sector ya sobrecargado
Gran parte de las empresas andaluzas son pymes y autónomos que representan el grueso del tejido empresarial de la región. Este tipo de empresas, que en su mayoría operan en sectores como turismo, servicios o comercio, se verían particularmente afectadas por una reorganización forzada de su jornada laboral.
Para AJE Andalucía, la imposición de una reducción de la jornada sin mecanismos de compensación adecuados podría ser perjudicial -especialmente en cuanto a incrementos de costes laborales- para los jóvenes empresarios, quienes a menudo operan con márgenes ajustados en los primeros años de actividad y, a día de hoy, ya enfrentan dificultades derivadas de la inflación, los costes energéticos y la falta de recursos.
En este sentido, Félix Almagro, presidente de AJE Andalucía, señala que "no se puede abordar una reducción de la jornada sin garantizar que las empresas, especialmente las pequeñas, tengan los recursos y la flexibilidad necesaria para adaptarse. De lo contrario, corremos el riesgo de generar más desempleo y de dificultar aún más la consolidación de los nuevos negocios, que ya operan en un entorno muy competitivo".
Diversidad de sectores y territorios: la necesidad de un enfoque personalizado
Desde AJE Andalucía se subraya también la diversidad de sectores y territorios en los que operan las empresas, lo que hace que una medida de carácter uniforme no sea aplicable en todos los casos. Andalucía, con su fuerte sector turístico y agrícola, presenta características económicas y sociales muy distintas a otras regiones del país, lo que exige un enfoque más flexible y adaptado a la realidad de cada sector. Implementar una reducción de jornada de manera uniforme podría generar desajustes entre las distintas comunidades autónomas y empresas, afectando a las que tienen una estructura más vulnerable.
"Una medida de este tipo no puede aplicarse de manera uniforme, ignorando las particularidades y capacidades de cada zona, sector y empresa. Es fundamental escuchar a quienes están en el día a día del tejido productivo para evitar consecuencias adversas", añade Almagro.
Llamada a la reflexión: no es el momento de una imposición generalizada
AJE Andalucía hace un llamamiento a reflexionar sobre las consecuencias de esta propuesta para las pymes y los autónomos y pide al Gobierno que, en lugar de imponer una norma generalizada, fomente el diálogo social y facilite las condiciones necesarias para que las empresas puedan adaptarse a los nuevos desafíos sin verse forzadas a realizar cambios que afecten su funcionamiento y viabilidad.