El presidente de ANTAXI, Julio Sanz, comparecerá ante los medios a las 10:30 horas frente al Ministerio de Transportes (Paseo de la Castellana, 67), en el punto de partida de la marcha, para explicar cuál es la situación de desamparo del sector ante las prácticas abusivas de las aseguradoras y solicitar una mayor implicación por parte de las administraciones públicas que permita garantizar la estabilidad de la actividad y la protección del profesional del taxi. La marcha se extenderá hasta el Ministerio de Economía (Paseo de la Castellana, 162).
Las reclamaciones se dirigen a las administraciones autonómicas y locales que fiscalizan el taxi, cuya intervención resulta clave para poder cumplir cuestiones normativas que permitan presentar el vehículo en perfecto estado de revista.
Asimismo, las peticiones ponen el foco en el Ministerio de Economía y el Ministerio de Transportes, ya que las diversas normativas “imponen” a los titulares de Licencia a contratar pólizas con más garantías hacia los usuarios que un vehículo normal. El sector reclama que se ofrezcan productos más completos a través del Consorcio de Compensación de Seguros para aquellos profesionales que, en la actualidad, no encuentran otra posibilidad de asegurar sus vehículos auto taxi.
Uno de los aspectos más cuestionados como consecuencia de la negativa de muchas aseguradoras en asegurar un taxi es la incapacidad para hacer frente al libre mercado y la libre competencia. En este sentido, además de que el sector “pedirá un control de los precios acorde al valor del producto asegurado”, Julio Sanz, ha recordado una realidad en la que “el taxi rural está al límite de no poder prestar servicio por la imposibilidad de constatar un seguro y los taxis adaptados o Eurotaxis para las personas con movilidad reducida también están en riesgo por el incremento de los precios y, en algunos casos, por la negativa de las aseguradas de asegurar estos vehículos”.
A pesar de la DANA, los seguros han aprovechado para continuar incrementando las pólizas a los taxistas, algo que ha contrariado al propio Sanz, que ha señalado “la inmoralidad de aprovecharse de las desgracias ajenas en casos flagrantes en los que se está pagando más por el seguro del taxi que la propia letra del crédito del vehículo”, concluye Sanz.
Unos problemas actuales que se unirán a otros, como las dificultades para que el sector cumpla con las exigencias medioambientales europeas y de sus respectivos ayuntamientos debido a la negativa de las aseguradoras a la hora de asegurar vehículos Cero emisiones o Eco, así como la imposibilidad de contratar seguros a todo riesgo o seguros más completos, que repercutirá en las diferentes normativas municipales que obligan al perfecto estado del vehículo.
Por último, el sector exige transparencia a las compañías aseguradoras, ya que estas revelan un incremento de la siniestrabilidad que no coincide con los datos que maneja el colectivo y las asociaciones de ANTAXI. Por eso, ante el volumen de vehículos que componen el colectivo, cerca de 67.000 en toda España, el sector reclama figurar en un listado exclusivo para evitar su posible inclusión en otras modalidades de transporte ajenas a las de los Taxis que, de este modo, estarían influyendo en las primas abonadas.