Análisis y Opinión

La ciencia y el terrorismo

Francisco Meana

CONCIENCIA ECONÓMICA

Por Francisco Meana

Francisco Meana | Lunes 19 de enero de 2015
Frecuentemente, el terrorismo como de hecho ocurre no se plantea como una realidad científica basada en conductas desviada, actitudes y pautas de comportamiento hasta una serie de adoctrinamientos, creencias y procesos internacionalización del radicalismos asimétricos. Los reclutamientos están enmarcados, en una manipulación de la relevación en un tiempo y realidad histórica teológica que no es asimila por la colectiva. Todo apostata o hereje no pertenece a una realidad religiosa, su clave es destruir y crear condiciones de una guerra por objetivos o plantear un Estado con distintos, actores políticos pero con una finalidad la pureza del integrismo catatónico.


El miedo es la mejor lealtad que existe, para el terrorismo cuando hablamos de mensajes subliminares que hoy sea asienta en la redes de internet. Los mensajes son capaces de crear unas condiciones alucinógenas capaces de crear fenómenos de locura individual y colectiva. La llamada a la muerte es un signo que no pertenece al conocimiento de Dios su contexto inmediato es la desestructuración familia, laboral que supedita todo una sociedad pre social que no ha construido un Estado o Instituciones Políticas capaces de separar, los asuntos civiles y las creencias. El conflicto es la experiencia de una mentes destructivas capaces de construir a sangre –fuego un mundo basado graves conflictos inter-religiosos
Las señas de identidad de Oriente Medio sigue siendo un escenario – donde el cruce intereses estratégicos, políticos y religioso- es de suma gravedad para la estabilidad mundial. Intereses de Siria, Irak, Irán y los países del Golfo ha creado una suma de individuos fanatizados por una causa de fe, pero que en el fondo hay intereses económicos como imperialista en su raíz común.

Para muchos que ingresan en redes terroristas locales o internacionalistas son manipulados por los regímenes teocéntricos o estrategias políticas militares de esos países. Nos enfrentamos “a problemas de la sociología clínica “y Estados que necesitan individuos para destruir el espacio geográfico –humano del país y producir desplazamientos masivos (catástrofes humanitarias).

El seno de un individuo o colectivos pro-guerra, combina el concepto atractivo de transforma una realidad social sesudo-religiosa; las emociones como las contradicciones de la violencia son inmensas. El líder determina las cohortes de edad y su preferencia por países. Pero a la vez las luchas internas o los planes criminales afectan, intensamente al terrorismo en toda su amplitud local, individual o conquista de un país.

Nuestra civilización que adquiridos valores incardinados y desarrollo económico muy importante se enfrenta a un mundo cada vez más aislado en actores peligrosos capaces de producir sociedades y países inestables cada vez más acentuado. Necesitamos conocer con más profundidad las nuevas formas de violencia desde las ciencias sociales mas avanzadas cuantitativamente y cualitativamente.