El billete verde cerró ayer en negativo frente a todos sus pares del G10, a excepción del franco suizo, debilitado por una contundente intervención del BNS en el mercado cambiario, según indican los datos de depósitos bancarios a la vista. El retroceso del dólar estuvo principalmente motivado por un tono más relajado en los mercados financieros internacionales, a raíz de las noticias entrantes sobre el cese de algunas medidas de confinamiento en Europa y Oceanía y la introducción de un masivo estímulo monetario en Japón.
Esta mañana, en cambio, los mercados operan de forma mixta tras la caída del crudo de petróleo, que continúa operando en niveles históricamente bajos. Aunque los eventos más relevantes de la semana no se esperan hasta mañana la publicación del PIB en el primer trimestre del año y la reunión de la Fed, el calendario de hoy ofrece el indicador de la confianza de los consumidores en abril, un dato que sirve como antesala para la evolución de la inflación de demanda.
La libra esterlina opera con un tono pasivo frente a sus principales rivales, mientras los inversores se abaten por el retardo con que el fin del confinamiento retorna al Reino Unido en relación con otras economías europeas y antípodas. En comentarios tras su retorno de la recuperación del covid-19, Boris Johnson instó al público a mantener las medidas de precaución a pesar de la creciente presión que recibe el gobierno para poner los planes de apertura en marcha.
Esta mañana, en cambio, la libra se ha dinamizado positivamente con los anuncios del Ministro de Hacienda, RIshi Sunak, incrementando la accesibilidad de los pequeños negocios a mejores provisiones de crédito. Según el ministro, estarán disponibles fondos de hasta £50 mil sin intereses por un año a los negocios con estrés financiero, que estarán a su vez, completamente respaldados por el gobierno. Hoy se reportan cifras de ventas minoristas en abril.
El peso mexicano logró revertir su racha bajista de los últimos cinco días y cerró en positivo frente al dólar y el euro. El repliegue del billete verde a nivel internacional a raíz de un entorno de mayor apetito por el riesgo trajo un moderado ímpetu a las divisas emergentes a inicios de semana, dentro de las que el peso mexicano quedó en segunda posición. La tasa de desempleo en marzo publicada ayer también añadió soporte a la moneda azteca, al reportarse un descenso a 2.94%, de 3.88% el mes anterior de las cifras no desestacionalizadas. Sin embargo, esta recuperación del peso podría durar poco en tanto las malas noticias se siguen acumulando para la economía mexicana.
El precio de la mezcla mexicana de exportación inició la semana con una caída de 23% respecto a la jornada del viernes, ubicándose ayer entre sus menores valores históricos, de $6,55 por barril. Con el referencial WTI sosteniendo las presiones bajistas en un entorno de demanda limitada y capacidades de almacenamiento agotadas, la recuperación de la industria doméstica no se avizora en el corto plazo. Hoy el calendario ofrecerá los detalles de la balanza comercial mexicana en marzo, mientras los mercados se preparan para la cifra de contracción de la actividad económica en el primer trimestre del año el próximo jueves.