La pérdida de movilidad es un asunto realmente importante y para el que la solución más inmediata es la utilización de una silla de ruedas. Se trata de una herramienta imprescindible en la vida diaria de una gran cantidad de gente, tanto para personas mayores que cuentan con problemas de salud que les impide poder moverse con total libertad, como para personas con algún tipo de discapacidad o para aquellas que hayan tenido algún tipo de lesión, accidente u operación, y necesiten utilizar una silla de ruedas para desplazarse durante un periodo de tiempo concreto.
Al tratarse de un artículo tan básico e importante para mejorar la calidad de vida de muchas personas, es importante saber elegir bien la silla adecuada para cada tipo de situación y dolencia. No todas las sillas de ruedas manuales son iguales ni sirven para los mismos casos, por lo que vamos a comentar a continuación algunas de sus características básicas más relevantes para ayudarnos a tomar la mejor decisión. Solo así podremos conseguir un producto de calidad, cómodo, resistente y con una buena relación calidad-precio para poder sacar el máximo partido de dicha adquisición.
Diseño ergonómico y materiales transpirables
El primer aspecto que vamos a tratar es el de su diseño, poniendo el foco de atención en la ergonomía del mismo. Esto quiere decir que se tiene que adaptar a la perfección a la forma del cuerpo de cada usuario para no generar ninguna presión, repartir todo el peso entre el respaldo y el asiento, y poder mantener la estabilidad. De esta forma, su uso prolongado será muchísimo más cómodo y podremos evitar algunos de los problemas más comunes en el uso de sillas de ruedas, como pueden ser las úlceras. Es por eso que cuando necesitamos contar con una silla de ruedas para una persona que tiene algún tipo de problema de movilidad grave y que tenga que permanecer mucho tiempo en ella, esta característica es esencial para cuidar de su salud.
Otro aspecto importantísimo tiene que ser el de calidad de sus materiales, en especial, en las zonas como los asientos o el respaldo. Tenemos que asegurarnos de que se trate de elementos transpirables y que sean completamente higiénicos para poder limpiarlos con comodidad. Así tendremos siempre la garantía de contar con una silla resistente que pueda durar en el tiempo, sin importar el uso que se le haya dado. En cuanto a los materiales, mencionar también la importancia de que se traten de elementos antideslizantes que impidan que la persona se pueda resbalar o adquirir posiciones incómodas.
Otros complementos
Las sillas de ruedas manuales pueden contar también con otra serie de complementos para hacerlas todavía más cómodas y prácticas de usar. Algunos de ellos pueden ser el caso de los reposacabezas y reposapiés regulables, así como que tengan un sistema de plegado de manera que permita que sea más cómoda de manejar y de guardar cuando no se necesite. Además, existen también motores eléctricos muy sencillos de instalar en las sillas y que permiten que sea muchísimo más cómoda para el acompañante sin tener que empujar la silla, sobre todo cuando el peso es elevado y tenemos que subir alguna cuesta o desnivel. Otros complementos para sillas de ruedas que pueden ser realmente útiles y eficaces son las barras antirrobo, los portasueros o los soportes para llevar botellas de oxígeno.