Sociedad

¿Cómo saber si tu hijo tiene el peso y la talla ideal para su edad?

HAY QUE ESTAR PENDIENTE DE LOS ALTIBAJOS

· Cada pequeño puede tener su ritmo de crecimiento, si está un poco por encima o por debajo del promedio no debe ser un motivo de alarma. Pero cuando se pierde o se gana peso de forma brusca, o se detiene el crecimiento repentinamente, lo mejor será consultar al pediatra

Redacción | Miércoles 05 de mayo de 2021

Cuando se tiene un hijo es normal preguntarse si se está desarrollando como debería, si se está alimentando bien y qué cambios necesita. Los padres pueden preocuparse si el hijo de algún pariente o vecino crece o pesa más o menos que el suyo, pero es necesario saber que la edad no es el único factor que influye en el desarrollo de un bebé. Una revisión periódica con el pediatra permite evaluar las alternativas para que el bebé crezca sano y feliz, que es el anhelo de todos los padres, pero ¿cuál se considera el peso ideal del bebé?



Crecimiento en los primeros años

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estableció una guía a través de percentiles (sistema estadístico) que permiten determinar la talla y peso ideal según edad niños desde que nacen, y por la cual se guían los pediatras para evaluar el desarrollo infantil. No se trata solo de medidas estándares, debido a que factores como la herencia genética, el sexo, las condiciones del embarazo y otros aspectos se deben tener en cuenta para saber si un bebé está creciendo sano.

El pediatra debe llevar control del peso y la medida desde el nacimiento, con énfasis en el primer año de vida, para saber si todo va bien. Se considera que al momento de nacer una niña debe medir entre 46 y 53,5 cm, y tener un peso entre 2,4 a 4,2 kg; si se trata de un niño los valores varían solo un poco, entre 48,5 y 51 cm de largo y el peso entre 2,5 y 4,3 kg, eso siempre que sean embarazos a término y sin problemas (después de las 37 semanas de gestación).

La OMS estima que un niño debe crecer entre 3 y 5 centímetros por trimestre y aumentar su peso entre 750 y 900 gramos cada mes en los primeros tres meses de su vida; los niveles pueden ir variando después de esto. Entre los tres y seis meses debería aumentar entre 500 y 600 gramos, y entre el sexto y noveno mes, ganar entre 350 y hasta 400 gramos.

Se considera que un bebé, al cumplir los seis meses debe duplicar su peso al nacer, con alimentación exclusiva de leche materna. Cuando el pequeño cumple su primer año de vida, el índice de crecimiento suele bajar a la mitad, y a partir de los dos años su estatura aumenta de 6 a 8 centímetros cada año.

Para los dos años, según las estimaciones de la OMS, un niño de 2 años debe pesar cerca de 12,9 kg y medir unos 88 cm.

En internet se pueden encontrar calculadoras del percentil para evaluar cómo está creciendo el niño. Si el percentil de peso es 50, indica que de cada 100 pequeños de su edad, 50 pesan o miden más que él o ella. Si se trata de un percentil 20 de talla, quiere decir que 80 niños de cada 100 son más altos que él o ella y el 20% son más bajos.

Muchos padres se alegran cuando tienen un bebé grande y pesado, pero esto no es garantía de salud. El sobrepeso en los bebés puede ser tan perjudicial como el peso bajo.

Pendiente de altibajos

Lo que se debe tener claro es que si un bebé está compensado, está alegre y activo, y se interrelaciona con otros existen pocas probabilidades de que sufra un problema de salud, puede ser que su promedio no esté necesariamente en la media, pero si la variación de peso es regular no habrá de qué preocuparse.

Siempre se debe estar pendientes de altibajos bruscos en el peso de los bebés, que pueden ser señal de problemas, como hipertiroidismo, hipoglucemia u otros problemas de salud.

Las tablas y los promedios son solo referenciales. Las valoraciones del peso, talla, perímetro craneal y velocidad de crecimiento son variables, de esta forma son los pediatras quienes pueden determinar si hay algo que atender, si hace falta hacer cambios en la alimentación o pueden indicar complementos vitamínicos o tratamientos para alcanzar el potencial del bebé.