Análisis y Opinión

¿Tocaremos tierra? Nos vamos a hartar

Enrique Calvet ha sido europarlamentario y es Presidente de ULIS.

LA VERDAD POR DELANTE

· Por Enrique Calvet, ex europarlamentario y Presidente de ULIS

Enrique Calvet | Lunes 09 de agosto de 2021
En este agosto en que la coyuntura y, un poco, el morbo políticos se han ido de vacaciones proponemos reflexionar, más allá de eslóganes de forofo, sobre algún tema trascendental que condicionara el futuro. Escarbando un poco con la verdad por delante. Por ejemplo, parece que nuestro porvenir está amenazado por la “agonía” de nuestro planeta y que será lúgubre como no sepamos “salvarlo”. ¿En serio? ¿Qué queremos decir con esta arrogante aseveración? Primero hemos de decir que el planeta Tierra “per ipse” desde hace 4500 millones de años goza de excelente salud, y parece que eso durará al menos otros 5000 millones de años. Eso sí con sus ciclos, sus glaciaciones, sus meteoritos impactantes, etc...

Es decir su dinámica propia medida en tiempo geológico y absolutamente fuera del alcance de lo que pueda hacer la especie humana. Por lo que no nos preocupa el planeta, sino el planeta que queremos tener ahora. Es decir es una versión antropocéntrica mucho más que ecológica. Esto es muy natural y positivo pues, por puro sentido común, la especie humana vela por sus intereses. A nadie se le ocurriría volver a la Tierra de los dinosaurios, en la que el planeta Tierra también estaba en plena forma, sencillamente porque no existía la especie humana…Conviene recordar esto ante las chaladuras apocalípticas de algunos que abogan por la desaparición del ser humano como solución o de Ministros/as que se lanzan a campañas de veganismo obligatorio, de protección de las vacas madres o volver a tiempos previos al conocimiento del fuego. Lo que queremos es el mejor planeta para el ser humano de 2021 y para él, y sobre todo para el ser humano de la civilización occidental, sin disimulos. Y nos parece perfecto.

Ahora bien, una vez constatado que estamos en algún tipo de mini ciclo o ciclo geológico dónde se pueden medir y observar, muy a corto, tendencias de cambios en las temperaturas, en las estaciones, en los monzones, tal vez en fenómenos naturales y asumiendo que esos cambios serán estables un cierto tiempo conviene no caer en otra arrogancia. Y ésta consiste en creer que el planeta que nos espera en el futuro cercano será peor que el actual para nuestra vida. O, dicho de otro modo, que la situación actual del planeta es la óptima y conviene congelarla, cual foto fija, pues todo lo que venga será peor. ¿Dónde quedan los estudios sobre los efectos positivos del llamado cambio climático? Cómo las nuevas rutas abiertas a la comunicación y al transporte. Estamos seguros que el planeta del futuro traerá también mucho provecho. Así que cuanto menos alarmismo y más sentido común mejor. Y, finalmente, paroxismo de arrogancia, algunos muchos parten del principio de que el “homo sapiens sapiens” tiene la capacidad y los conocimientos para modificar drásticamente los fenómenos geológicos. ¡Un poquito de por favor! Algo podemos, recuérdese el éxito con la capa de ozono, pero si la ola es de fondo, bien poco podemos.

¿Qué indican estas reflexiones? ¿Qué no hemos de hacer nada ante lo medible? En absoluto, conviene hacer las cosas mejor y, sobre todo, resolver el problema de la sustitución de energías fósiles porque, sencillamente, son finitas y el fin de las aprovechables (muchas menos que las existentes) ya se barrunta en tiempo humano y no geológico. Pero las otras medidas deben medir muy bien el tiempo de su aplicación, la universalidad de su aplicación sin marginar a poblaciones enteras, la eficacia y, sobre todo, acompañarse de políticas y medidas que apoyen lo que mejor ha hecho siempre la especie humana: adaptarse. Adaptarse a las nuevas situaciones. Ya que somos capaces de prever seamos capaces de prepararnos para lo que viene, puede ser más sensato que un esfuerzo inútil bajo histérico pánico que pretenda impedir la evolución geológica de la Tierra. Aunque sea menos lucrativo para algún lobbying….