Antes de adquirir o negociar cualquier cripto, asegúrese de estar preparado para los riesgos adicionales que puede suponer para sus fondos. Algunos expertos dicen que es inteligente mantener las operaciones por debajo del 4% de sus fondos totales, además de utilizar plataformas como 1K Daily Profit para mejorar la experiencia de entrada al criptotrading.

Conocer el pasado para entender el presente y futuro

La cripto ha sido creada por un programador informático de origen ruso (hace más de 7 años), ETH no es solo una moneda digital como muchas otras criptos. Mientras que BTC se conoce como "metal precioso digital", ésta cripto también funciona como una plataforma de software. Cuando la gente se refiere a "Ethereum", suele hablar de la base tecnológica, mientras que la moneda nativa que se utiliza para realizar operaciones es el ETH.

Su valorización alcanzó un máximo histórico por encima de los USD 4.800 a finales del año pasado. No obstante, en lo que va de 2022 ha estado más cerca de los USD 3.000, con recientes caídas por debajo de esa cifra.

Analizando las oscilaciones de Ethereum

Revisar los antecedentes de fluctuación le permite obtener una mejor compresión de su crecimiento. A continuación, un vistazo a la cotización de la destacada cripto a lo largo de los años y cómo se compara con la caída actual de su valor:

2015: El origen de Ethereum

Los desarrolladores de ésta cripto, lanzaron la blockchain en 2015, dos años después de que el whitepaper esbozara el protocolo. Durante todo 2015, se valoró por debajo de USD 1, pero más importante que su valor fue el potencial que los criptocomerciantes vieron en ella.

2017: El primer gran pico

Con paso firme adquirió más volatilidad, se empezaron a ver saltos en el gráfico, en los que su valor superaba -y luego volvía a caer- los máximos históricos. La primera escalada rápida se produjo entre abril y junio, cuando ETH pasó de los USD 40 a un precio de aproximadamente USD 362. Logró algunos picos y valles más, hasta que su siguiente máximo histórico llegó en diciembre, esta vez de USD 826. Ese año cerró en torno a los USD 772.

2018: Un momento récord en el tiempo

En enero de 2018 arrancó con un valor 600 veces superior al que tenía apenas dos años antes, en enero de 2016. La euforia, sin embargo, llegaría a su punto máximo y se desvanecería justo después de que superara un nuevo umbral, unos USD 1.396. Las cosas cambiaron rápidamente después de eso. Salvo un breve repunte hasta los 816 dólares, su valor descendió durante todo el año, cerrando en torno a los USD 141.

2021: El año de la ETH

El mercado de NFT explotó en 2021 y creció hasta convertirse en un sector multimillonario. Las mejores colecciones de NFT como CryptoPunks y Bored Ape Yacht Club, se negociaron por decenas de millones de dólares.

Debido a sus capacidades de contratos inteligentes, ésta plataforma fue (y podría decirse que sigue siendo) la más popular para acuñar, comprar y negociar. Aunque los competidores se están moviendo ahora que las tarifas de servicio son altas y el tráfico está abarrotando el sitio web.

No es de extrañar, por tanto, que el precio de ETH se disparara de unos USD 730 a finales de 2020 a USD 4.000 en mayo de 2021, seguido de otro pico histórico en torno a los USD 4.800 en noviembre.

Pero desde los albores de 2022, la valoración volvió a caer por debajo de los USD 3.000. Las propensiones bajistas del mercado de criptos han comenzado a circular, de hecho, algunos especulan que podrían apoderarse de la narrativa al menos momentáneamente.

Recomendaciones para comerciar sobre ETH

Al igual que con cualquier instrumento con alta fluctuación, los planificadores financieros dicen que hay que ignorar estas oscilaciones y centrarse en la estrategia a largo término, ya sea con criptografía o sin ella.

Una buena regla general, según la mayoría de los asesores en finanzas, es exponer un pequeño porcentaje de su fondo en criptos, del mismo modo que lo haría con otra negociación alternativa que exista fuera del mercado de valores tradicional. En general, esto significa que entre el 1% y el 4% de su fondo total debería estar, como máximo, en criptografía. Un porcentaje mayor le expone a un mayor riesgo y tendría que aguantar algunas oscilaciones importantes.

Si decide comerciar sobre los cambios de valor a corto término, el BTC y el Ethereum son dos opciones interesantes por el potencial de rendimiento que brindan.