La empresa, con 10 años de experiencia y líder de economía circular a nivel nacional, ha cerrado el ejercicio de 2021 aumentando un 72,49% la facturación a nivel nacional. Respecto al año anterior, la facturación de las tres delegaciones de PRS en España ha crecido un 46,33% en Pamplona (Navarra), un 117,80% en Térmens (Lérida) y un 251,91% en Benifaió (Valencia). La facturación de PRS también ha crecido en Puebla (México) con un aumento del 32,84% respecto a 2020.
“Este año hemos notado un gran aumento del mercado de logística y alimentación y la incorporación de nuevos clientes en el sector industrial dedicados al alquiler de envases de plástico. Esto, sumado al creciente interés por la economía circular y el compromiso medioambiental de las empresas, nos hace ser optimistas para este 2022 y prevemos superar los 4M€ en facturación”, explica Toni Astibia, director general en Plastic Repair System.
A lo largo de 2021, el trabajo de PRS ha permitido recuperar 2.830 toneladas de plástico que han contribuido en evitar la emisión de 11.811toneladas de CO2 a la atmósfera.
Incorporación de nuevas tecnologías
Con el objetivo de potenciar la competitividad y ofrecer valor añadido a los clientes, PRS ha mantenido su apuesta por las nuevas tecnologías. En esta línea, PRS ha sido la primera empresa del sector en incorporado este 2021 un sistema de trazabilidad a través de RFID’s en la sede de Pamplona. Se trata de un innovador sistema de identificación por radiofrecuencia que permite realizar un seguimiento de los envases retornables de transporte y ofrecer un mayor control de calidad en cuanto a reparaciones y mejor control de los ciclos de vida de los envases retornables de plástico.
PRS ha podido llevar a cabo esta innovación tecnológica gracias a Horizonte 2020, un programa de investigación e innovación puesto en marcha por la Unión Europea (UE) y que ha permitido impulsar la competitividad de PRS.
“También hemos apostado por la implantación de captura de datos digital y la instalación de una máquina de Visión Artificial en Pamplona. Los datos recopilados y las innovaciones tecnológicas nos permiten alargar la vida útil de los envases y aportar valor añadido a nuestros clientes. Nuestro objetivo es seguir investigando qué herramientas nos pueden ayudar a mejorar, tanto a nosotros como al medioambiente”, concluye Astibia.