Owin, empresa de nueva creación en Barcelona, propone llegar a un acuerdo para acometer una reforma gratuita para el cliente, que puede suponer entre 18.000 y 30.000 euros para luego venderla con el acompañamiento de distintas inmobiliarias, aliviando la presión de las visitas y del control de obra al propietario.
Gracias al contrato de servicios que firman con el propietario y con las inmobiliarias de la zona de Barcelona, Maresme y Vallés Occidental, la vivienda se vende en menos de un año a un precio que puede ser, un 30% por encima del precio que se conseguiría con una vivienda de origen.
“Después de la pandemia hay muchos pisos heredados que necesitan actualizarse. Principalmente es necesario acometer una reforma que incluya un cambio de cocina y baños, de ventanas por otras más eficientes e incluso un cambio de suelo. En algunas viviendas más antiguas es necesario actualizar también las instalaciones eléctricas y de gas para cumplir con las nuevas normativas” tal y como comenta Daniel Muñoz, uno de los socios.
Esta opción de vivienda reformada para entrar a vivir, es la más demandada porque también, en el caso de los potenciales compradores, su tasación de cara a solicitar la hipoteca es superior y les permite un mayor acceso al crédito.
Pese a que Owin es una nueva propuesta, la experiencia de quienes están detrás en el sector, haciéndose cargo incluso de las reformas de ciertas carteras de inversión, permiten a quienes apuestan por sus servicios tener un aliado que conoce a fondo la demanda del mercado y que es capaz de actualizar una vivienda para poder venderla en tiempo récord.