Dos elecciones y ¿un destino?

Sólo añadimos dos visiones a las reflexiones. Primero, como persona del ámbito social-demócrata, o social-liberal (a la manera de Unamuno-Prieto) que somos, constatamos con lamento una vez más la desaparición de esa opción ideológica “de facto” del panorama electoral español, y observamos en lo que han convertido los Zapateros y los Sánchez al PSOE de la Transición, renegando de valores como la igualdad ontológica, el patriotismo, la solidaridad, la protección del débil, la Educación etc… Y segundo, tras felicitar sin ambages al Señor Moreno Bonilla, suyo es el éxito, es destacar que también es una gran victoria para el Señor Núñez Feijoo y su estrategia nacional. Ello, que tiene sin dudas aspectos positivos, también supone un apuntalamiento fortísimo del régimen actual y una continuidad de unos modelos económicos y políticos que nos están desmembrando y empobreciendo. De nuevo las reformas estructurales indispensables se alejan mucho…

Las segundas elecciones celebradas la semana pasada han sido las francesas, y puede que tengan consecuencias para los ciudadanos europeos y españoles en el medio plazo. En muy, muy resumidas cuentas, diríamos que Francia queda más complicada de gobernar y que el “centro” probablemente podrá hacerlo por el radical antagonismo de los dos grandes grupos de la oposición entre sí: la ultra derecha de Le Pen y la ultra izquierda friki de Mélenchon. Ahora bien, una sola cosa une a esos dos grupos, su feroz anti-europeísmo (más que anti UE, anti europeísmo) y anti-otanismo. Y son el 40% de la Cámara Baja francesa. Que un país motor de la Unión Europea sea inestable y, sobre todo, tenga dificultades para tomar grandes decisiones europeas en un momento en que la UE se juega su supervivencia, es mala noticia para los europeos, y por ende, para los españoles. Ya llegamos tarde para algunas decisiones tan urgentes e indispensables como difíciles.

Para terminar, un apunte que nos ilustra sobre nuestro incierto “destino”. En esta semana se ha sabido que China ha encontrado un sistema de reutilización permanente de los residuos radioactivos de alta intensidad como fuente de energía, y también que se ha convertido en la segunda potencia naval del planeta, aun a gran distancia de EEUU por supuesto, pero por encima de todas las demás naciones, con la botadura de un portaviones más. Hay más en cantera. Uno recuerda que la función de “gendarme del mundo” de los EEUU se debe, esencialmente, a su poderosísima y enorme Armada o la frase de un sabio amigo nuestro: “Cuando la UE sea capaz de enviar dos portaviones europeos, de fabricación europea, con tripulación y mandos de todas las nacionalidades europeas, al estrecho de Ormuz para preservar el comercio mundial, ese día los ciudadanos europeos, y los españoles, empezaremos a ser verdaderamente soberanos, dueños de nuestro destino”. Pues para el largo plazo ya sabemos lo que nos espera, nuestra tarea y sus dificultades: ir preparando nuestro destino con los condicionantes que vamos conociendo. Ni Andalucía, ni España, ni la UE podemos perder un minuto.