(SanchoPodemismoSeparatista). Y en muchos aspectos. No es sólo que haya conseguido sacar con amplia facilidad tres proyectos de Ley y tres Decretos Leyes demostrando total fuerza de la coalición SPS y del Gobierno en el momento que mejor le convenía, en plan puñetazo en la mesa ante la negociación de la simbólica Ley de Presupuestos, y mostrando estabilidad ante la UE. Es que ha manejado con absoluta maestría la propaganda y comunicación. Desde hacer creer que la aprobación de las normas estaba en peligro durante mucho tiempo para reforzar mejor su victoria en pro de la estabilidad, hasta confundir y mostrar debilidades e incoherencias gallegas del PP, pasando por hacer creer que gobernar por Decreto Ley es bueno o que la Ley del “sí es oui” es una novedad revolucionaria cuando es un mal refrito de lo existente.
En justicia, hay que decir que varias de esas normas, como la de Autónomos conseguida por pleno consenso, algunos aspectos sociales a corto plazo del plan energético, la Ley de la Ciencia o la Ley de segunda oportunidad son imperfectas, cómo no, pero positivas. Incluso la Ley de libertad sexual es bien intencionada pese a crear mucha confusión para su aplicación por los jueces. Por lo que visto el momento triunfal y conociendo las habilidades de Sánchez para manejar mejor que nadie las carencias de nuestro incauto electorado, no venderíamos la piel del úrsido antes de tiempo.
Además, y engarzando con lo anterior, un error grave para el bien común, a nuestro juicio, es aceptar que el único debate importante versa sobre la gestión socio-económica a corto plazo. Es cierto que el electorado parece cansado e irritado como suele ser siempre que soporta dos mega-crisis terribles, pero nada nos hace pensar que la gestión de lo que se ve como alternativa posible vaya a ser mejor. ¿Qué propone? ¿El populismo de bajar impuestos sin tener en cuenta al BCE ni a la giga-deuda que han generado entre Rajoy y Sánchez? ¡Venga ya! Eso ya lo vivimos.
Y aquí engarzamos con otro punto que nos alarma, como ciudadano que se preocupa por el futuro de sus descendientes y de los españoles del porvenir. ¿Qué propone la alternativa, vulgo el PP, sobre los problemas reales, existenciales y deletéreos de España, atrozmente agravados por el SPS? Hablamos de la Educación, de la putrefacción de casi todas las Instituciones democráticas (justicia, legislativo, tribunal de cuentas,…) o del inmenso deterioro de las sociales (CNI, fuerzas de seguridad, medios de comunicación, universidades, …). Hablamos también de la carrera alocada hacia cotas intolerables de desigualdad en derechos civiles y libertades de ciudadanos españoles (¿indultos?), económicos también por supuesto. Hablamos del desguace de España, de la defunción de nuestra libertad de mercado, de los totalitarismos racistas delincuentes periféricos. ¿Qué piensa hacer frente a todo eso “la alternativa”? Lo que nos lleva a la cuarta idea: ¿se ha enterado, “el recambio”, de los verdaderos problemas de España, los estructurales que nos acercan al abismo? ¿O están en plan regadera?
Coda a modo estrambótico: En la duda, abstente (Zoroastro) y la abstención será el Partido ganador una vez más.
Si (
No(
