Diseñado para promover el autoconsumo energético y respaldar la transición verde hacia fuentes de energía más sostenibles, el alquiler de placas se ha posicionado como un recurso especialmente valorado. Al optar por el alquiler de placas solares, los usuarios pueden aprovechar los beneficios de la energía renovable sin necesidad de realizar una inversión inicial significativa.
Esta propuesta busca democratizar el acceso a la energía solar, permitiendo que un mayor número de personas y empresas puedan disfrutar de los beneficios de generar su propia electricidad a partir del sol. Además, al tratarse de un alquiler, los clientes pueden contar con el respaldo y la asistencia técnica del proveedor, lo que garantiza un funcionamiento óptimo y sin preocupaciones del sistema fotovoltaico. ¿Estás valorando la posibilidad de alquilar tu sistema de paneles fotovoltaicos? Presta atención, a continuación, te hablamos de sus principales ventajas.
Los beneficios del autoconsumo
El autoconsumo fotovoltaico se presenta como una solución eficiente y rentable para reducir el gasto en electricidad. Esta innovadora instalación se ha traducido en cambios en los hábitos de consumo y proporciona numerosas ventajas, siendo el ahorro en la factura de luz su principal beneficio.
Un análisis comparativo revela que, en promedio, el consumo eléctrico disminuye en un 50% tras la implementación de paneles solares. Esta cifra resulta asombrosa y demuestra el potencial económico que subyace en la generación de energía solar.
La reducción del consumo se traduce en una notable disminución de los costes asociados. Además, al considerar que la cuota mensual para el alquiler de las placas solares es moderada, el ahorro en la factura de luz resulta suficiente para cubrir dicha cuota. En otras palabras, los pagos relacionados con el autoconsumo fotovoltaico se pueden compensar íntegramente con la reducción del importe de la factura de electricidad. Es importante destacar que esta factura no solo contempla el consumo neto de electricidad, sino que también incluye una compensación por la energía fotovoltaica generada pero no consumida, que es vertida a la red.
Este enfoque permite a los usuarios no solo reducir su dependencia de la red eléctrica convencional, sino también contribuir activamente a la producción de energía sostenible. Al aprovechar los recursos solares disponibles, se fomenta la autosuficiencia energética y se promueve la protección del medio ambiente.
Además de los beneficios económicos y ecológicos, el autoconsumo fotovoltaico ofrece estabilidad en el suministro eléctrico. Los cortes de luz y los apagones repentinos son situaciones que se minimizan considerablemente al contar con una fuente de energía confiable y autónoma.
El alquiler es la alternativa más asequible
El alquiler de placas solares, un servicio ofrecido por Otovo, ofrece una ventaja significativa en comparación con la financiación tradicional a través de préstamos bancarios. Mientras que los préstamos convencionales suelen tener un plazo de amortización de entre 10 y 12 años, los contratos de alquiler de sistemas fotovoltaicos presentan una duración de 20 años o más. Esta extensión en el plazo se traduce en cuotas mensuales más reducidas y, además, abarca servicios adicionales que no se ofrecen a través de la financiación bancaria.
Es importante destacar que el único componente cuyo contrato de alquiler tiene una duración menor son las baterías solares, que se estipula en 10 años. El motivo que se esconde detrás de esta diferencia radica en las garantías proporcionadas por los fabricantes. Aunque el contrato de alquiler de las baterías es inferior al del sistema en general, ello no implica que, al finalizar el contrato, las baterías dejen de funcionar.
Esta modalidad de alquiler brinda una gran tranquilidad y seguridad al usuario, ya que, al término del contrato, se convierte en propietario de los componentes del sistema, sin incurrir en gastos adicionales. Además, durante el período de alquiler, el cliente disfruta de todos los beneficios de la energía solar sin preocuparse por los costos de mantenimiento y reparación, ya que estos aspectos están cubiertos por el contrato.