A mediados de esa década, el enfoque se amplió y se empezó a valorar cada vez más la calidad y el gobierno de datos. En ese momento, el CDO empezó a asumir la responsabilidad de establecer estándares que aportasen valor a los datos en una organización.
En los últimos años, con la creciente importancia de la transformación digital y la analítica de datos, el papel del CDO se transforma en un catalizador de la estrategia empresarial, comenzando a liderar diferentes iniciativas para aprovechar los datos como un activo estratégico, impulsando la innovación y la toma de decisiones.
En la actualidad, el número de responsabilidades asociadas a esta figura se ha incrementado: no solo gestionan los datos, sino que, además, son los encargados de fomentar una cultura en torno al valor de los datos que poseen en la organización y promover su uso en todas las áreas.
El Chief Data Officer es el encargado de controlar y dirigir la gestión estratégica de los datos.
A partir de una consulta realizada a varios de nuestros socios, el año pasado, se ha podido comprobar que más de la mitad de las grandes empresas disponen ya de un CDO, si bien el título del puesto cambia en función de la organización (Gerente de Gobierno y Analítica del Dato, CDO, Data Strategy, etc.).
Las responsabilidades principales atribuidas a esta figura en el marco de una organización son:
- Comprobar que los datos son precisos, confiables y coherentes.
- Desarrollar y ejecutar una estrategia integral de gestión de los datos alineada con los objetivos de la organización, lo que lleva a cambios en la manera de recopilarlos, procesarlos, compartirlos y usarlos.
- Trabajar con equipos de liderazgo que identifiquen oportunidades de innovación en relación con los datos.
- Establecer políticas y procesos que detallen quién tiene acceso a determinados datos, cómo gestionar aquellos más sensibles y tomar decisiones en torno a los resultados.
- Garantizar el cumplimiento normativo.
- Colaborar con distintos equipos con el fin de garantizar la eficacia y la coherencia en el uso de datos.
- Fomentar una cultura empresarial en la que las personas valoren los datos como un elemento imprescindible para alcanzar los objetivos organizacionales.
- Evaluar herramientas y plataformas de análisis de datos que faciliten a los empleados el acceso a información valiosa para mejorar la toma de decisiones.
- Gestionar y evaluar los riesgos ligados a la seguridad y la privacidad de los datos.
Al liderar estrategias de datos, garantizar la calidad y seguridad de la información, fomentar la toma de decisiones y promover la innovación, el CDO impulsa la eficiencia operativa, la toma de decisiones informada y la adaptabilidad en un entorno empresarial en constante cambio, lo que conduce al crecimiento, la ventaja competitiva y la sostenibilidad de una organización.
Por ello, el CDO desempeña un papel protagonista en el marco de la Gestión 5.0, siendo clave para todas aquellas organizaciones que apuestan por una Gestión Excelente, Innovadora y Sostenible, debido a que nos encontramos ante un panorama dinámico y cada vez más impulsado por los datos.