Según BIGBAN Annual Report, la totalidad de los FO encuestados tienen su sede en España. En los últimos cinco años los Family Offices han explosionado. La mitad de ellos tienen una trayectoria entre 1 y 5 años, entre 6 y 11 años se hallan el 23%. En cuanto a la gestión profesional se observa una gran diversificación en el número de inversiones en sus carteras. La mitad de los FO alcanza una diversificación mínima, superando las 10 startups. El tamaño medio del equipo gestor se encuentra entre los 3-6 empleados.
En relación a la gestión profesional de inversiones se observa una gran diversificación en el número de inversiones de sus carteras. El 91% realiza la inversión en startups de forma directa. El 73% de los FO entablan inversiones con terceros. Las inversiones conjuntas presentan varias ventajas como puede ser la diversificación del riesgo y de los costes y favorece la posibilidad de operar de modo conjunto para incrementar la rentabilidad, y diversificar la cartera. Además, afirman los encuestados que el 75% de los FO ha tenido una experiencia positiva en la inversión conjunta.
El 95% de los FO se presentan como agnósticos a la hora de invertir, poniendo el foco de su inversión en en empresas que consideran rentables o con buenas oportunidades de inversión . Solo el 5% restante invierte en sectores verticalizados, en los que destacan legaltech y sportech. La mitad de los que han formado parte de esta encuesta ha liderado una ronda de inversión, lo que destaca las capacidades del equipo gestor.
El 45% de los FO que han respondido a la encuesta de BIGBAN Inversores Privados y ESIC Business & Marketing School destinan entre un 5-10% a su inversión en startups, señalando que el 43% ha invertido entre 1 y 5 startups en los últimos tres años. Los tickets se encuentran entre los 100 y los 500K de inversión. El 91% de ellas invierte en empresas de modelo B2B. Sus etapas predominantes de inversión son pre-seed y seed y su principal zona de inversión es España. El 50% de los FO ha tenido algún exit y para alcanzarlo, el 73% de estos, ha destinado un plazo de entre 4 y 6 años para la desinversión. Su múltiplo de salida de los últimos 3 proyectos desinvertidos se encuentra entre un 3-4x. En cuanto al follow-on, el 57% no tienen una política y actúa según las circunstancias. La mitad de los FO mantienen una fuerte vinculación con las startups invertida, puesto que participa en el board (consejo de administración) y apoya la estrategia. Tan solo el 18% declara que su relación es únicamente financiera.
Los factores determinantes a la hora de realizar sus inversiones se encuentran las cualidades del equipo y al líder por encima del nivel de innovación del proyecto. Los proyectos descartados de modo directo son aquellos que tienen un equipo poco solvente, valoraciones elevadas o las ideas poco originales.
También en el caso de los FO durante el 2024 se mantendrá la prudencia en la inversión- De hecho, el 32% de los consultados considera que durante este 2024 se dará una reducción moderada en la inversión de los FO. Entre los retos fundamentales que subrayan para mejorar y agilizar su inversión en startups señalan a los incentivos fiscales, reducción de la regulaciones y la burocracia a la hora de iniciar los proyectos.