Tras provocar la retirada del techo de gasto para evitar nuevas derrotas, Puigdemont eleva su apuesta para aprobar los presupuestos al exigir una financiación todavía más singular denominada oficialmente 'concierto económico solidario' de Cataluña. El fugado ex president vuelve a dar un ultimátum para prestar sus votos con el aviso de que si el gobierno quiere el apoyo deberá acudir a Waterloo. El dirigente de Junts advierte incluso con exigir una moción de confianza y revelar, además, las actas de la negociación secreta en Suiza.
Mercadeo en una Legislatura ingobernable
La oposición liderada por Feijóo da por "ingobernable" la legislatura -parafraseando al propio Sánchez al “no tener coche ni gasolina”-, mientras sus socios se lanzan al mercadeo de las cuentas públicas además de otras prebendas con el concurso de ERC, PNV, Bildu y Podemos. El agrietado bloque de investidura expresa, no obstante, su malestar, por la interlocución casi absoluta de Moncloa con Junts que ya se ha cobrado pagos como el impulso de las comisiones de investigación sobre la operación Cataluña contra líderes independentistas, la comisión de la "verdad" de los atentados yihadistas de 2017, la desclasificación de información "secreta o reservada" del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), el compromiso de transferir la Inmigración a la Generalitat o el reconocimiento oficial del catalán en la UE, así como la aplicación efectiva de la amnistía. Los nacionalistas vascos confían en acelerar sus competencias pendientes, incluida la gestión del régimen económico de la Seguridad Social. Hasta la Chunta aragonesa, BNG y Compromís ven posible arañar más prebendas a cambio de respaldar las cuentas del Estado.
Rearme del gobierno
Entre tanto, el presidente agiliza su rearme con la profunda reforma del núcleo duro de Moncloa y el fichaje de profesionales demoscópicos, en un intento de resistir y encarrilar la empinada la legislatura. El responsable y nuevo gurú de la guardia pretoriana gubernamental pasa de secretario general de Políticas Públicas, Asuntos Europeos y Prospectiva Estratégica, a la jefatura del Gabinete del presidente con la estrategia de posponer al máximo unas elecciones anticipadas. Diego Rubio es el autor de la famosa tesis doctoral sobre La ética del engaño: secretismo, transparencia y falsedad, para ensalzar sus bondades como elemento modernizador de la vida pública. Afirma el consultor electoral que no importa la verdad o la mentira, sino lo que perciba el ciudadano, tras argumentar que el engaño no solo forma parte de la política, sino de la vida diaria de cada uno.
La estrategia se complementa con el bombardeo orquestado del consejo de Ministros al completo -por tierra, mar y aire- contra el PP, con amenazas, consignas y hasta eslóganes burlescos del peor monólogo chusquero. La última, protagonizada por la ministra Rodríguez tras presionar a las CC.AA. "insumisas" con sustraer fondos estatales si no aplican la Ley de Vivienda.
Impostura de Zapatero
Zapatero rompe su silencio cómplice e inexplicable para justificar el papel de mediador con la dictadura venezolana y su participación en el exilio a España del candidato opositor que ganó las elecciones. El ex presidente evita criticar al régimen de Maduro con el argumento de que en “el futuro” puede seguir siendo “facilitador” en Venezuela mientras reconoce haber facilitado una solución (temporal) sin confirmar los detalles de las dos llamadas a la vicepresidenta chavista, Delcy Rodríguez, antes de acudir en dos ocasiones a la embajada española para negociar con Edmundo González, obligado a salir del país por las “presiones inenarrables y amenazas extremas”. Desde 2015 Zapatero ha participado como observador en todos los comicios que convoca el dictador bolivariano, ayudándolo a blanquear sus diferentes fraudes en las urnas.
De vivir el recordado Rubalcaba seguro que hubiera preferido ver su antiguo presidente atesorar hasta dos puertas giratorias para entretenerse todavía más, en lugar de maquinar al servicio de la dictadura venezolana. Su bagaje desde que dejó la Moncloa no ha sido otro que añorar su alianza de civilizaciones y el universo “infinito” y planetario en el que pudo cumplir el sueño de coincidir con Obama, además de escribir libros para ocupar el tiempo rodeado de escoltas.
Puente, reprobado
El ministro de Transportes se convierte en el cuarto miembro del Gobierno reprobado en lo que va de legislatura tras la censura a los titulares de Interior (Grande Marlaska) y de Presidencia (Bolaños), por la gestión de sus respectivos departamentos. La reprobación de Oscar Puente, a iniciativa del PP, es apoyada por las formaciones independentistas de ERC y Junts por su “manifiesta incompetencia” al frente del ministerio, su “incapacidad para solventar las innumerables incidencias” en la red ferroviaria y su poca sensibilidad y falta de respeto ante las protestas de los usuarios. Según los senadores de Junts -Pujol- y ERC -Laura Castel-, “Cataluña tiene todas las razones para reprobar al ministro”, asegurando que las Rodalias fallan “como una escopeta de feria” mientras el AVE Madrid-Barcelona empieza a mostrar “signos de debilidad”.
Memorias reales
Hasta el rey Emérito está decidido a publicar sus memorias ante la sensación de que le están robando su “historia”, además de las fotos comprometidas con Barbara Rey que considera otra “cacería”. El libro titulado Reconciliación, ya tiene comprador en Francia, cuya editorial (Stock) tiene intención de publicarlo a principios de 2025. Ni que decir tiene que las editoriales españolas también están interesadas en las autobiografía de Juan Carlos I. La obra, de más de 500 páginas, no oculta los errores, arrepentimientos y hasta sus malas elecciones en los casi 40 años de reinado desde la restauración de la monarquía tras la muerte de Franco, entre ellos, el papel que jugó el 23-F de 1981 para frenar el golpe de Estado.