El original concepto de Santoku está compuesto por un excepcional menú degustación de seis pases por tan solo treinta y cinco euros. Una propuesta de cocina nipona a un precio popular, que ha hecho que resulte casi imposible conseguir sitio en su única mesa. Por eso, hace unos meses abría sus puertas Santoku La Barra, fiel al mismo concepto, pero con algunas modificaciones ya que aquí en lugar de en una mesa para ocho comeremos en una impresionante barra con capacidad para trece comensales.
Al frente de Santoku, su chef y artífice, el encantador venezolano Gabriel Suárez, nos continúa sorprendiendo con su curiosa historia personal. Un emprendedor nato que se ha formado a sí mismo y que curiosamente es vegetariano. Gabriel jamás prueba los platos que elabora, pero gracias a sus estudios de sociología es capaz de medir el grado de satisfacción en los rostros de sus clientes. Pequeños grandes bocados de la mejor cocina nipona que enamoran a todo aquél que los prueba.
Nuestro menú degustación en Santoku La Barra comenzó con un sorprendente
temaki que tiene una base de arroz, una hoja de shiso fresco, sésamo y un corte de pez mantequilla. Un exquisito comienzo que se disfruta mejor comiéndolo con la mano como nos aconsejaron. Continuamos con un plato que hace un divertido guiño a España, más concretamente a las Islas Canarias. Se trata de un tataki de atún marinado en soja, jengibre y sésamo, que va acompañado de mojo canario, cebolla morada, un toque de kimchi y una salsa a base de mascarpone. La combinación de lácteos con el mojo canario nos pareció una verdadera locura.
El tercer pase toma forma en un original montadito de salmón. Con una crujiente base de pan bao frito, aderezado con una mayonesa de tomate seco y kimchi, y coronado con un tartar de salmón marinado al momento con aceite de albahaca. Para coronar el rico bocado le añaden perlas de arroz y germinados de rabanito que le aporta un acertado y delicioso punto crujiente.
El menú continúa con el plato que le dio la fama a Santoku y que permanece en el menú desde sus orígenes. Un donburi, (que significa cuenco de arroz), con una mayonesa a base de ostras, furikake (un condimento de bonito, huevo y alga nori) y cuatro cortes de anguila kabayaki, que queman y caramelizan justo antes de servir con azúcar de caña. Una combinación diferente, dulzona y deliciosa, que nos llevó a una vistosa bandeja de makis, compuesta por tres makis rellenos de tartar de atún con langostinos en tempura, mezclados con salsa sriracha, salsa de anguila y huevas de pez volador. Y, por último, incluye una tartaleta que lleva de base un huevo de codorniz frito, tartar de atún y sésamo. Un verdadero espectaculo que nos condujo al último pase del menú degustación.
Para finalizar, nos sorprenden con un bocado con dulces matices. Un nigiri de la parte grasa del salmón, con plátano flambeado con azúcar de caña, crema de queso y ralladura de limón. Una pequeña elaboración que ha sido concebida para disfrutarla en un solo bocado y que hace las veces del postre, sin duda, el broche final perfecto para la velada.
Santoku La Barra, el último proyecto de Gabriel Suárez enamora al público madrileño con los mejores sabores de la cocina nipona que nos aguardan en su espectacular barra. Un original concepto que traspasa los limites de los puramente gastronómico y que hace que merezca la pena la espera. ¿Os podréis resistir?
SANTOKU 181
Dirección:
Calle de Lope de Rueda, 6,
28009 Madrid
SANTOKU LA BARRA
Dirección:
Calle de Lope De Rueda, 16,
28009
Reservas: san-toku.es
Web: https://www.san-toku.es/
Ticket Medio: 35€