En lo que a cultura local, seguimos con la resaca de las fiestas que dura hasta febrero. Estamos bloqueados hasta que no pasen los Oscar de Hollywood y comprobemos que lo del Woke en USA no ha terminado y le dan el Oscar Reivindicativo a Karla Sofía Gascón y de Alcobendas como Penélope.
Del impetuoso ministro de cultura poco se sabe. De momento sigue todo igual y donde dije Digo, digo Diego, todas sus flamígeras propuestas siguen lomismo o más bien paralizadas y ahora tiene que explicar (o descifrar) que significan sus indescifrables soflamas, entre ellas lo que significa eso de los Derechos Culturales y se gasta 3,4 millones de euros en una campaña.
La campaña de Derechos Culturales surge de la comprensión de la cultura como un «derecho humano esencial» y aseguran que el objetivo de dicha acción es «expandir» la percepción de la cultura hacia una visión más cotidiana e inclusiva y fomentando la participación activa de la ciudadanía”.
Y en segundo lugar «generar familiaridad» con el término Derechos Culturales, reconociendo la cultura como un derecho fundamental al mismo nivel que otros derechos ya establecidos y vinculándolo a mejoras significativas en aspectos como la igualdad, la justicia social y el bienestar general. ¿Ustedes entienden algo?. Tranquilos. Él tampoco.
El que si que entiende, es el que va a llevarse crudo los 3,4 millones de euros.
Lo de los fastos de “Franco murió en paz en La Paz” tampoco se sabe cuando van a comenzar en serio, aunque visto lo visto, parece que nadie se lo toma en serio. Lo malo es que tampoco se sabe que va a costar el asunto, ni quien lo va a pagar, si el ministerio de cultura o el ministerio paralelo que se ha montado el Primer Ministro en Moncloa.
Seguimos con los expolios arqueológicos a los se suman los paleontológicos, que según que Comunidad Autónoma, no saben si se deben proteger o no. Tal vez sería bueno que se repusiera Jurassic Park para que se comprendiera que el asunto despierta interés comercial y turístico, ya que por lo visto que se expolie y trafique con los restos de los dinosaurios celtibéricos no importa a nadie en el IPCE.
Como desde el IPCE ya sé me dirán aquello de que “¡Si que nos importa, pero no tenemos presupuesto!”, me temo que seguiremos igual.
Vemos pues, cierta sequía informativa en esto de las cuestiones del Patrimonio.
A ver si Karla se lleva el Oscar, que oye, si se lo lleva un-una español-a, mejor que mejor, independiente. Aunque como tía me parece un zarrío, francamente
Y nos ponemos en cosas más serias.