Las compañías de seguros cuentan con un amplio abanico de concesionarios y servicios técnicos que suelen agrupar a la práctica totalidad de los talleres. La situación no esconde una realidad que a muchos les merece desconfianza, ya que el 20% de los talles españoles, en torno a 10.000, son ilegales o no cumplen con la normativa vigente, por lo que la mayor parte de los automovilistas opta por el servicio técnico del concesionario que le vendió el coche, y donde se mantienen las garantías, en el caso de los coches nuevos, o por “talleres de confianza”, que son en los que ha tenido previamente alguna experiencia o que alguien le ha recomendado.
Es por ello que, cuando tenemos algún percance o avería con el coche, la compañía aseguradora siempre nos pregunta a qué taller queremos llevar el coche, ofreciéndonos la confianza de nuestra preferencia, si la tuviéramos. Al final, solamente el 23,4% de los titulares de los seguros opta por el taller sugerido por la aseguradora, y una cuarta parte se deja llevar por un taller de confianza sugerido por familiares o amigos. También los hay, cada vez más, que se dejan llevar por algún comparador o indagan en Internet antes de tomar una decisión, aunque la urgencia de tener que atender las reclamaciones de los seguros hace que esta cifra aún no se haya disparado.
Lo habitual es que las compañías aseguradores, como
Génesis, ofrezcan además alguna ventaja, como la recogida y entrega del vehículo, el lavado interior y exterior del mismo tras las operaciones de reparación, o incluso algunas bastante excepcionales como un vehículo de sustitución o las reparaciones exprés sin peritaje previo o con peritaje a distancia, cuando el conductor es de confianza de la propia aseguradora. Hay algunas compañías que incluso ofrecen algún tipo de buscador para localizar el taller que más cerca tengamos del trabajo o de nuestra casa, buscando no solamente el mejor precio, que en la mayor parte de los casos absorbe la compañía, sino que garantiza la calidad del trabajo realizado, ofrecerá una atención personalizada con un trato preferente y terminan garantizando la máxima excelencia y rapidez en la reparación. Las compañías de seguros suelen
sugerir talleres recomendados por ellas, que cumplen con todas las garantías legales y autorizaciones, o que son también reconocidas por la mayor parte de las marcas de coches, pero, desde luego, no es hay obligación alguna de repararlos en dichos talleres.
Cada año hay en España más de 25 millones de coches accidentados, y un informe sobre siniestralidad de Sadyr puso en evidencia que el 21,38% de los conductores tiene un único accidente al año, aunque en torno al 20% supera los dos o tres accidentes por año. El
envejecimiento del parque automovilístico por efecto de la crisis, o el deterioro de los pavimentos por falta de mantenimiento, han terminado por disparar el número de siniestros en nuestro país.