SI VIS PACEM PARA BELLUM
La Infantería de Marina, la Patria y la Solidaridad
· Por Bernardo Rabassa
sábado 12 de noviembre de 2016, 07:57h
Cádiz, San Fernando, de nuevo, para un liberal patriota, como los de 1812, acudir invitado como Past Commodore of Mariners of International Yachting Fellowship of Rotarians, con un grupo de otros ocho de la Madrid Fleet por el Tercio de la Armada y su General Comandante Excmo D. Antonio Planells Palau, a un Acto Militar, con el que se forma la la infanteria de Marina, leyéndoles en el patio de armas diversos capítulos de las ordenanzas militares, a la vez que se premia con medallas y distinciones, a distintos componentes por sus méritos militares, con toda la solemnidad de las formaciones y posterior desfile de la fuerza, y las arengas que crean emoción y espíritu militar, valores por desgracia no muy frecuentes en nuestra España, dedicada en general a lo hortera, olvidada de que la Educación trata de formar personas, para una mejor sociedad, en la que los valores milita-res desplegados por los infantes de marina de solidaridad y de patriotismo, en aras de la Seguridad Nacional e Internacional, como lo demuestran los ejércitos de nuestro paós, hoy bastante olvidados por el El Estado, por el erróneo concepto de que la guerra no va a ocurrir, pero la Paz es el supremo ideal.
"Si vis pacem para bellum". La antigua frase Romana de Flavius Renatus Vegetius. Que los romanos empleaban con sentido Canónico. Y que hasta los dias de hoy debe ser el Lema Representativo y "sagrados" de todos los Estados, que no tienen otro sistema educativo en este sentido que hacerlo a traves de sus fuerzas armadas ya que no existe el servicio militar obligatorio, que a mi me sigue pareciendo un eficaz complemento de la Pedagogia y de la Psicologia en la preparación para la vida.
La Infanteria de marina es en este sentido, un ejemplo, el mejor, pues mezcla mar y tierra, en nuestro caso decidido por Carlos I en 1537 al crear tripulaciones de infantes del mar, como apoyo a las galeras y galeones de Marina de la Armada, con tercios fijos que apoyaran las batallas navales y sobretodo los desembarcos que como en el caso del de Alhucemas, fue pionero en el desembarco aronaval a nivel mundial, consiguiendo vengar la derrota de Annual y la verguenza del General Sil-vestre, enviando a Ab del Krim al exilio y creando el Protectorado Español de Marruecos, de lo que nos quedan las plazas de soberania de Ceuta y Melilla, el peñon de la gomera y las islas Chafarinas.
La Primera de las grandes batallas navales , en la que intervinieron: Lepanto, bajo la eficaz direc-ción de Juan de Austria y Alvaro de Bazan, con la presencia del infante Miguel de Cervantes de la que quedo manco y prisionero por años en Argel, y que llevo nuestra prosa a niveles culturales mundiales. El sería por su pluma y su valor un adecuado ejemplo de como la cultura y los valores deben estar presentes en el infante de marina(mariners como nosotros en ingles).
Los Rotarios mariners que dedicamos nuestra actividad al servicio al projimo en el mar y en las aguas, con unas 500 flotas y cerca de 5000 compañeros y que han ayudado a construir barcas y cha-lecos salvavidas en los pueblos primitivos que ya sea en la pesca ya en la emigración y en la bus-queda de refugio precisan seguridad en el proceloso movimiento de las aguas, las olas que se lle-van por delante muchas vidas, de seres indefensos en todo el planeta a quienes ayudar
El Tercio de la Armada, al que rendimos visita, nos acogió y no solo nos explico toda su activi-dad y los instrumentos que tienen para desarrollarla, hoy obsoletos algunos, por falta de medios, sino que nos mostraron su historico museo, con recuerdos desde el S. XVI hasta las Guerras de Cu-ba y Filipinas e incluso nuestra guerra civil y su capacidad operativa que les permitió recientemente en 12 dias tan solo, desplegar una misión de fuerza de paz en Libano. Siempre listos para el servicio a España y a su intereses nacionales e internacionales.
El Cuerpo de Infantería de Marina es una unidad operativa anfibia de élite encuadrada dentro de la Armada Española. Es la infantería de marina más antigua del mundo,(1537). Las funciones prin-cipales de los Infantes de Marina es su especialización en operaciones anfibias así como su operati-
vidad tanto por mar y tierra, esto es proyección del poder naval mediante el uso de fuerzas anfibias sobre una costa hostil o potencialmente hostil. El Cuerpo equivalente más conocido son los "Mari-nes" de los EE.UU.
Su capacidad para embarcar en muy poco tiempo junto con apoyos aéreos y terrestres orgánicos de la Armada, la convierten en una unidad de alto valor estratégico por su alto grado de adiestra-miento, capacidad y posibilidad de posicionarse de forma rápida y discreta en aguas internacionales; constituyendo un factor de disuasión considerable.
La Infantería de Marina tiene su origen en los Tercios Viejos, unidades de infantería inicial-mente destinada a ir embarcada en navíos, cosa que se hacía de forma temporal para realizar cam-pañas o combates específicos. La diferencia surge cuando se decide que estas tropas debían tener una dedicación exclusiva a la guerra naval. La Infantería de Marina de España, es la más antigua del mundo. Fue creada por Carlos I el 27 de febrero de 1537 al asignar de forma permanente a las escuadras de galeras del Mediterráneo las compañías viejas del mar de Nápoles. Sin embargo, fue Felipe II el que creó el concepto actual de Fuerza de desembarco.
Tras la desaparición de la escuadra de galeras del Mediterráneo en 1748, se procedió a la reor-ganización y a la modernización de la tropa de mar de ella, cambiando la denominación de las com-pañías existentes, dejando de ser conocidas por el nombre del capitán que las mandaba, y pasando desde diciembre de 1749 a nombrarse por un sistema ordinal, tal como ya se hallaba instaurado en muchos países europeos. De esta forma, en Cartagena quedaron constituidos un total de ocho bata-llones, compuestos de seis compañías cada uno.
En 1793, una mujer, Ana María de Soto, haciéndose pasar por varón con el nombre de Antonio María de Soto, se alista en la 6ª compañía del 11º Batallón de Marina, siendo licenciada con pensión y honores en 1798, al descubrirse que era mujer. Es la primera mujer Infante de Marina del mun-do.Durante la Guerra civil española un oficial de Infantería de Marina, Ambrosio Ristori de la Cua-dra, fue condecorado con la Placa Laureada de Madrid a título póstumo.
Curiosamente en su museo tienen el uniforme del General Varela con sus dos laureadas, pues antes estuvo en infanteria de marina. José Enrique Varela Iglesias nació en la ciudad gaditana de San Fernando el 17 de abril de 1891. Su padre, Juan Varela Pérez, era sargento jefe de la banda del 1º Regimiento de Infantería de Marina. A los 18 años ingresa como corneta en el mismo regimiento de su padre y en 1912, ya con el grado de sargento, logra el ingreso en la Academia de Infantería, obteniendo en 1915 el despacho de alférez de manos del rey Alfonso XIII.. La Laureada es la mayor condecoración de los ejercitos españoles y se precisa haber realizar un hecho heroico para recibirla en acción de guerra por España.
Lo importante para mi, pues es la capacidad de ejemplo que tiene la infanteria de marina, y solo se alcanza la educación en valores, siguiendola y conociendola, de ahi que difundir esta gran aventura, sea de importancia vital, para los medios de comunicación, que por lo general olvidan por la urgencia de lo diario, la trascendencia de lo vital y lo que hace que nos podamos mirar al espejo, los que ya tenemos cierto numero de años, con satisfacción por lo realizado en servicio a los demás.