El marcado industrial de piezas, en las que pueden disponerse tanto mensajes corporativos como características, es una práctica que puede efectuarse tanto por procedimientos mecánicos como la estampación, como por otros mucho más novedosos y, seguramente, más económicos. Una de las razones para apostar por un equipo de impresión láser en nuestro taller o empresa es que no tienen que realizarse troqueles fuera de nuestro taller, que la máquina de nuestra propiedad es absolutamente reconfigurable para cualquier nuevo trabajo y que podemos hacer, realmente, lo que deseemos. La virtualidad de uno de éstos equipos de marcado láser es una ventaja que abre nuevas puertas al ingenio y originalidad de las empresas, pudiendo personalizar prácticamente cualquier objeto de nuestra producción, desde metales o plástico hasta películas y pinturas o, incluso, materiales orgánicos.
Las posibilidades que ofrecen éste tipo de equipamientos láser es infinita y abarca todo tipo de sectores, como herramientas, sector de la automoción, joyería, material eléctrico, moldes, telas, válvulas y cualquier tipo de producto en cualquier material. La reducción de costes es una de las ventajas, dado que no tenemos que externalizar el marcado de nuestros productos ni encargar costosos troqueles que solamente sirven para una vez. Además los clásicos troqueles sufren mucho en la producción, se estropean y desgastan y, dependiendo de las cantidades a producir, con total seguridad deberemos volver a encargar nuevos troqueles.
La aplicación láser para el marcado permite además magníficos acabados, muy perfilados, que pueden incluir varios niveles de profundidad, logotipos o imágenes y escrituras muy pequeñas en diversas líneas, posibilitando virtualidades y acabados casi infinitos.
Este tipo de máquinas láser para el marcado y grabado permiten además soluciones “customizadas” o personalizadas que se adaptan a las necesidades de nuestro nuevo producto y estrategias, incorporando varios ejes, láseres de integración, o accesos complicados como los que se precisan en el marcado de motores o piezas cilíndricas, por ejemplo. Éste avance es algo que no permitan además los marcados mecánicos tradicionales, posibilitando una gran excelencia estética.
Y ¿Cuáles son las ventajas de éste novedoso procedimiento que tanto se ha extendido y abaratado costes? Pues, ya se trate de marcado láser para la identificación del producto o de grabado por láser profundo, de marcado superficial o de un grabado en 3D, el proceso de marcado láser ofrece importantes ventajas sobre otros procedimientos existentes:
- Es un método sumamente preciso y limpio realizado mediante un procedimiento sin contacto que no requiere trabajos previos o posteriores, es decir, que finaliza en sí mismo.
- Garantiza la identificación y trazabilidad de los productos con un acabado de altísima resolución.
- Asegura elaboraciones duraderas y resistentes a ácidos, agentes químicos y fenómenos de corrosión, sin dañar la superficie del material.
El marcado láser se convierte en una huella permanente, ideal para añadir texto, logotipos, indicaciones y demás, sobre cualquier material de manera extremadamente flexible, rápida y cualitativamente de resultados impecables.
La utilización de la tecnología para el marcado láser de metales se ha convertido, por tato, en un punto de referencia para realizar elaboraciones muy precisas y rápidas capaces de garantizar una mayor visibilidad de su propia marca y una constante trazabilidad de sus productos a lo largo del tiempo. Sorprende por su rapidez y limpieza sobre los tradicionales marcados mecánicos, que requieren máquinas muy potentes y pesadas.Por esta razón y por tantas otras el proceso de marcado láser está difundiéndose cada vez más en múltiples sectores de la actividad industrial.
En cuanto a los plásticos, el marcado láser proporciona marcar con una altísima calidad y de forma rápida y permanente casi todas las materias plásticas como policarbonatos, ABS, poliamidas, poliésteres, nylon y muchos otros.
Una de las aplicaciones en las que el marcado láser se ha demostrado como una innovación realmente atractiva es en el del marcado en películas, que ha reemplazado completamente a la serigrafía en la producción de las piezas que se emplean en las aplicaciones así llamados "day & night”. De hecho con el láser es posible controlar perfectamente la cantidad de material quitado y por tanto la profundidad del grabado, es posible definir perfectamente el tamaño de las líneas grabadas y mejorar la definición de los ángulos. De este modo se consigue una estética mejor y se obtiene sobre todo un significativo aumento de la productividad.
Finalmente, una nueva tecnología, el láser CO2, se h demostrado como una solución excelente para el marcado de materiales orgánicos como el vidrio, la piel, la madera y el papel, cuando el láser Nd: YAG (ej. Fibra), no garantiza resultados óptimos. Los láser CO2 pueden ser utilizados para marcar códigos alfanuméricos, logos, códigos de barras y Códigos QR en una variedad de materiales a elevada velocidad.
Las principales ventajas de esta tecnología son su fiabilidad y su productividad con respecto a las soluciones convencionales, como por ejemplo la impresión de chorro de tinta.
El marcado láser es un proceso rápido y de calidad impecable, siendo posible realizar, en tiempos muy breves, marcados de diversos contenidos sin necesitar de recomponer la máquina. Un sistema de marcado láser resiste además al desgaste en el tiempo, no necesita de tratamientos preventivos o posteriores y no presenta coste alguno de adquisición o eliminación de productos fungibles como tintas, pastas o aerosoles.
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