El funcionario se comprometió a mantener políticas consistentes y estables como parte de los esfuerzos para evitar que las personas beneficiadas recaigan en la pobreza.
Los distritos chinos han recibido un período de gracia de cinco años a partir del día en que abandonaron la lista de pobreza y durante ese tiempo seguirán disfrutando de las principales políticas de apoyo en este campo.
Para prevenir la recaída en la pobreza, China ha puesto en marcha un mecanismo a largo plazo de monitoreo dinámico de cualquier tendencia que indique un retorno a ese flagelo, así como controles regulares sobre los grupos clave, señaló Wang.
El apoyo de seguimiento se fortalecerá para la población reubicada, con esfuerzos dirigidos a desarrollar industrias, ayudarles a conseguir empleos y mejorar la infraestructura y los servicios públicos, recalcó el funcionario.
Tras la salida de la lista de pobreza del país de la totalidad de los distritos restantes, alcanzada en noviembre de 2020, China ahora trabaja para avanzar en su estrategia de vitalización rural y evitar que la población vuelva a ser presa de la indigencia.