Los casos de negligencia médica en España son más comunes de lo que muchos pueden pensar, de hecho, es una cifra que ha venido en ascenso. En 2019, se recibieron 13.454 denuncias, con casos de los cuales se produjeron 757 muertes, mayoritariamente por diagnósticos equivocados.
Son diversas las razones que pueden dar lugar a una reclamación médica. Además de errores en el diagnóstico, se puede mencionar la falta de indicación de pruebas, muerte o secuelas graves tras una incorrecta intervención quirúrgica, prescripción errónea de medicamentos, retraso en la prestación de la atención médica de emergencia, no valorar adecuadamente los signos de alarma, olvido de material de cirugía e interpretación equivocada de imágenes.
También son negligencias médicas: no cumplir los protocolos médicos como es debido, tratamientos médicos inadecuados, cirugías en zonas del cuerpo equivocadas, secuelas en pacientes por descuido del personal sanitario o por mal funcionamiento del centro hospitalario.
¿Qué se debe hacer?
Como norma general es fundamental indicar en primer lugar que siempre es muy importante que se guarde todo tipo de documento referente a indicaciones médicas, ya que pueden ser muy útiles en el caso de una reclamación posterior; igualmente, es importante hacer un seguimiento fotográfico de la lesión, cuando se pueda sospechar que es consecuencia de una negligencia.
Es esencial que se contacte lo más pronto posible con un despacho de abogados que tenga especialistas en negligencias médicas. Son profesionales en el área, las personas indicadas para dar las orientaciones y los consejos de acuerdo con las circunstancias particulares del caso, ya que en muchas ocasiones, las primeras acciones son clave para lograr el éxito final en el proceso.
Los especialistas analizan cada caso con el apoyo de peritos y médicos, de tal forma, que se encargan de explorar las opciones antes de interponer denuncias/demandas. Los abogados especialistas acompañan a sus defendidos en todo el proceso, dando la atención personalizada necesaria en todo momento.
Algunos aspectos a tener en cuenta
Es importante saber que en muchos casos de negligencias médicas, la solución a la controversia se realiza por vía extrajudicial. En algunos casos, es la mejor forma de obtener una indemnización rápida sin altos costes judiciales, de hecho, muchas veces las aseguradoras prefieren esta vía, al saber los riesgos en los que podrían incurrir al perder una demanda, por lo que se inclinan por llegar a acuerdos. En este escenario, la asesoría legal especializada es esencial para obtener la mejor indemnización posible.
Un aspecto importante que puede definir el proceso a seguir, es si la negligencia ocurrió en un centro hospitalario público o privado. En el caso de los centros públicos, el proceso comienza interponiendo una reclamación patrimonial contra el Servicio Autonómico de Salud, con el fin de obtener una indemnización económica que se pueda constituir como una reparación íntegra al paciente afectado o a sus familiares.
En el caso de una negligencia médica en un centro hospitalario privado, el mismo debe asumir la responsabilidad contractual cuando el caso se da mediante la prestación del servicio contratado. Se habla de responsabilidad extracontractual cuando se trata del personal sanitario o centro hospitalario a traés de un seguro médico.
Generalmente, es un año el tiempo máximo para reclamar una negligencia médica, ya sea en un centro público o privado; aunque en este último, cuando se trata de reclamación contractual, se extiende por 5 años.
Las indemnizaciones por negligencias médicas dependen del caso en cuestión, en especial, si son daños personales o materiales. En cuanto a los daños personales hay que mencionar las lesiones personales, incapacidad temporal y daño moral; mientras que los daños materiales se refieren al daño emergente (gastos derivados de la negligencia) y lucro cesante (pérdida de la situación y capacidad económica del afectado).